Hace tres días, gracias a un video de seguridad, de un restaurante en Cali, se logró conocer que la secuestradora se dirigiría rumbo a Ipiales, Nariño, con el objetivo de pasar a Ecuador, señaló La FM Radio.
Así fue como en Tulcán, Ecuador, el Gaula logró ubicar a Sebastián Infante Rondón, de nacionalidad venezolana, por quien las autoridades habían ofrecido una recompensa de 50 millones de pesos.
Según Caracol Radio, a esta hora se hace la coordinación entre las autoridades, para trasladar al menor a la ciudad de Cúcuta y entregarlo a su madre en la zona de frontera.
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El rapto del niño se registró en un inmueble utilizado para alojar a ciudadanos extranjeros, entre Colombia y Venezuela. La mujer se ganó la confianza de la progenitora supuestamente para transportarlo al médico y así fue como posteriormente desapareció con el niño.
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