La mujer, identificada como Carmen Vargas y de 30 años de edad, fue perseguida, despojada de su mascarilla de protección y cortada en una mano con un vidrio, denunció Vicky Fernández, gerente de House Care Medical, IPS para la que trabaja la enfermera.

“La acorralaron y le gritaron que ella tenía coronavirus, le arrancaron el tapabocas. Llevaban un cuchillo e intentaron apuñalarla, pero ella se defendió y con un vidrio lograron cortarla”, señaló la portavoz de la IPS en declaraciones destacadas por Blu Radio.

Cierran clínica por brote de COVID-19 en  funcionarios

Artículo relacionado

Brote de COVID-19 hizo cerrar una clínica por contagio masivo de funcionarios

Según el testimonio, la enfermera, que se dirigía a la casa de un enfermo al que cuida, alcanzó a gritar y vecinos del sector salieron a auxiliarla, momento en el que los agresores escaparon del lugar.

Según el medio, este incidente se suma al ocurrido una semana atrás en Montería, donde otra profesional de la salud fue derribada de su moto por gente que la señalaba de propagar el virus.