Toda una familia fue encontrada muerta en la vereda Atalayas del municipio de Aguazul (Casanare), la cual estaba compuesta por los dos padres y los dos hijos, quienes tenían cinco y dos años, respectivamente. Lo más confuso del caso es que en el lugar de los hechos no se encontraron indicios de que haya sido por algún tipo de riña entre ellos o por parte de un tercero.
De acuerdo con los datos de las autoridades, los cuerpos fueron hallados el pasado viernes 27 de junio, sobre las 6:00 p. m., cuando un ciudadano llegó hasta la estación de policía de Aguazul para informar que había dos personas en la finca La colombianita.
Este es un hecho que se suma al sucedido en 2023, cuando en esa población una mujer encontró en su casa a sus dos hijas menores de edad muertas, justo después de volver al trabajo. Circunstancia que también dejó demasiados interrogantes, ya que no habían muchas pistas sobre lo ocurrido.
Ahora bien, en cuanto a lo ocurrido en la vereda Atalayas, del municipio de Aguazul (Casanare), personal de la policía judicial Sijín y el cuerpo técnico de investigaciones (CTI) de la Fiscalía, llegaron hasta la finca La colombianita, donde se encontraron que no eran solo dos muertos, como lo había mencionado el ciudadano que llegó a la estación de policía, sino que se trataban de cuatro fallecidos, pertenecientes al mismo núcleo familiar: padre, madre, hija e hijo.
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De acuerdo con las autoridades, las cuatro personas muertas son: Rafael Estrada Granados, de 46 años, y Andrea Alejandra Samacá Rodríguez, de 24 años, oriundos de San Luis de Palenque y Hato Corozal (Casanare), y sus hijos Evelyn Dayana y Damián Alejandro Estrada Samacá, de 5 y 2 años, respectivamente, según lo expuesto por El Tiempo.
Hasta el momento, en el lugar de los hechos, no se evidencian signos de violencia en las personas, ya que ninguno tiene heridas de golpes físicos, con arma blanca o de fuego. Sin embargo, en la habitación había un olor extraño, muy similar al de un insecticida, y uno de los fallecidos tenía espuma en la boca, por lo que podría tratarse de una intoxicación por ingerir alguna bebida.
Por ahora, las autoridades están esperando el dictamen del Instituto de Medicina Legal y la investigación que adelanten los investigadores bajo la dirección de la Fiscalía, para determinar las causas reales del deceso de esta familia en la vereda Atalayas, de Aguazul (Casanare).
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