Noticias de Manizales y Caldas: todo en actualidad, investigación, deportes, vías y noticias de la región en La Patria.
El reciente accidente ocurrido en la avenida, a la altura de la carrera 9, donde un peatón perdió la vida tras ser atropellado por un camión, refleja profundas problemáticas en materia de seguridad vial y responsabilidad ciudadana. Joaquín Emilio, originario de Ituango, Antioquia, falleció después de intentar cruzar por un lugar no autorizado, sin utilizar el puente peatonal disponible, lo que condujo a la tragedia pese a los intentos del conductor por evitar el impacto, según la fuente original. Este hecho no es una excepción, sino parte de una tendencia que afecta a muchas urbes de América Latina.
Estudios realizados en Colombia demuestran que la mayoría de accidentes fatales de peatones suceden cuando estos cruzan fuera de los pasos designados, empujados tanto por la prisa como por la falta de cultura vial o deficiencias en el diseño de las ciudades (Ministerio de Transporte de Colombia, 2023). La disposición de infraestructuras como puentes o separadores no garantiza, por sí sola, la seguridad, pues persiste el reto del uso inadecuado y de comportamientos arriesgados. Así, las autoridades de movilidad enfrentan el obstáculo de una costumbre arraigada de transitar por lugares inseguros, originando un desafío permanente para la prevención efectiva.
Expertos en movilidad, citados por la Fundación Gonzalo Rodríguez, destacan la importancia fundamental de la educación vial permanente y campañas pedagógicas que refuercen el uso de infraestructuras seguras. Aseguran que las acciones técnicas deben ir de la mano de un proceso deliberado de transformación cultural, donde la ciudadanía asuma la importancia de respetar la señalización y priorizar su integridad física. Estas estrategias requieren, además, acompañarse de controles y un diseño urbano que faciliten e incentiven el tránsito seguro por las vías asignadas a los peatones.
Un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre seguridad vial corrobora que el 35% de las muertes en zonas urbanas ocurre en escenarios donde confluyen vehículos y peatones en áreas mal señalizadas o con baja visibilidad. Es decir, no basta con señalar la responsabilidad personal, sino que resulta indispensable perfeccionar la planificación urbana para reducir riesgos y salvar vidas.




Sobre el caso de Joaquín Emilio, los documentos indican que estaba identificado en Bogotá, lo que podría estar relacionado con migración interna, fenómeno que, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), incrementa el peligro de siniestros para quienes no conocen el territorio ni las normas locales. Esto subraya la necesidad de que las ciudades fortalezcan el acceso a información sobre movilidad segura para los recién llegados y la población flotante.
La pérdida de este ciudadano evidencia que la respuesta debe partir de una articulación entre autoridades locales, comunidad y especialistas en ingeniería urbana y salud pública. La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que los peatones siguen siendo uno de los grupos más vulnerables en América Latina, por lo que urge intensificar los esfuerzos para atajar las raíces culturales y estructurales de este problema y configurar entornos seguros que eviten futuras tragedias.
¿Qué medidas pueden tomar las autoridades para reducir accidentes de peatones? La discusión sobre este tema es pertinente, porque el informe de la Fundación Gonzalo Rodríguez y los datos del Ministerio de Transporte subrayan que la reducción de siniestros requiere un enfoque combinado entre educación vial y adecuación de infraestructura. Actualmente, la eficacia depende tanto de campañas permanentes como del rediseño de entornos inseguros y de la imposición de controles efectivos para sancionar conductas de riesgo.
Estas acciones no solo buscan proteger a los peatones, sino sensibilizar a toda la ciudadanía frente a la responsabilidad colectiva de la seguridad vial. Además, resultan esenciales en contextos de migración interna y crecimiento urbano, donde cada vez más personas usan el espacio público sin conocerlo a fondo, incrementando el riesgo de incidentes.
¿Qué significa infraestructura vial? La comprensión del término es clave para entender las soluciones propuestas en materia de seguridad. Infraestructura vial se refiere al conjunto de elementos físicos tales como puentes, pasos peatonales, separadores, señalización y cruces semaforizados, diseñados para organizar el tránsito de vehículos y personas en vías urbanas y rurales.
El correcto uso y diseño de esta infraestructura permite reducir la probabilidad de accidentes, al definir rutas seguras y separar flujos de peatones y automóviles. La falta o mal estado de estos elementos incrementa el riesgo y dificulta un tránsito ordenado en entornos urbanos densamente poblados.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO