Peleas con los medios:

En la retina está el caso en que Trump decidió retirarle la acreditación de entrada a la Casa Blanca al periodista de CNN Jim Acosta. Sin embargo, a lo largo del año tuvo más roces con la prensa:

– A April Ryan, periodista de Urban Radio y colaboradora de CNN, le dijo que hacía “preguntas muy estúpidas” al ser preguntado por el caso de Jim Acosta. Incluso amenazó con quitarles la credencial a otros periodistas.

– Durante un viaje en el avión presidencial, Trump hizo un berrinche porque en el televisor de su esposa estaba sintonizado CNN. El multimillonario desde siempre ha criticado esta cadena y es abierto seguidor de Fox.

– El mandatario, además, trató de “viciosos” a los medios que, supuestamente, especularon sobre la salud de su esposa cuando tuvo que ser operada de un riñón.

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– ‘Fake News’. Como muchas otras veces que se defendió argumentando que lo que decían sobre él eran noticias falsa, atacó a la agencia de noticias AP, luego de publicar una entrevista con él.

Trump llegó a arremeter en contra del gigante Google. Amenazó con controlarlo por, supuestamente, amañar la información sobre él que el popular buscador les ofrece a sus usuarios.

Generó indignación por su inhumana lucha contra la migración:

– En junio, el mundo criticó los ‘campos de concentración infantiles’, cuando, con su política, separó más de 2.000 mil niños latinos de sus padres.

– Amante de los muros, le propuso crear uno en el desierto del Sahara (África) al ministro de relaciones exteriores de España, Josep Borrell.

– Trump llamó “animales” a algunos inmigrantes ilegales. “No se puede creer lo malas que son estas personas”, dijo durante un debate sobre pandillas.

Trump

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– Aunque lo negó, varios acusaron al presidente de Estados Unidos de decir “países de mierda” a El Salvador, Haití y algunos territorios africanos.

– En otra de sus salidas comparó a inmigrantes con la serpiente venenosa de la fábula de Esopo. “Estamos dejando entrar a la gente, y va a haber mucha gente. Solo va a ser peor”, dijo en su momento.

Atacó a otros políticos:

“Mala e incompetente”, así trató Trump a la alcaldesa de la isla San Juan, Puerto Rico. El rifirrafe se extendió durante todo un año y en su mayoría se trataron vía Twitter.

Trató de “perra” a Omarosa Manigault-Newman, una exasesora de la Casa Blanca que grabó, a escondidas, el momento en el que John Kelly, jefe de gabinete, le notificó su despido.

– Trump explotó en ira y amenazó al presidente de Irán, Hasan Rouhani. “Nunca jamás amenace a Estados Unidos otra vez, o sufrirá consecuencias como las que pocos antes han sufrido”, escribió el presidente en su cuenta de Twitter, su principal arma para atacar a todos sus objetivos.

Donald Trump

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– En tono de burla, llamó “Pocahontas” a la senadora demócrata Elizabeth Warren. Además, la acusó de mentir sobre su origen con el fin de obtener ventajas en su carrera, incluido un trabajo en Harvard.

Escándalo sexual con actriz porno y otros:

– Así comenzó el año para Donald Trump. Desde enero lo empezaron a vincular con Stormy Daniels, que a lo largo del año fue revelando más detalles sobre el supuesto encuentro sexual que tuvo con el magnate.

Aunque lo negó, también se conoció que le había dado dinero a su abogado (130 mil dólares) para llegar a un acuerdo y que no dijera nada más sobre el tema.

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– Entre otras, se burló abiertamente de una mujer que denunció abuso sexual. El mandatario ironizó sobre el hecho de que no recordara detalles del día en que ocurrió el presunto ataque.

– También tuvo su rifirrafe con varios jugadores de fútbol americano de la NFL. Varios de ellos se arrodillaban durante el himno nacional para llamar la atención sobre la injusticia racial. “No deberían estar en el país”, zanjó.

– Incluso llegó a utilizar la estrategia antisocialista, muy vista en Latinoamérica, que atemoriza con la situación de Venezuela: “Si los demócratas ganan, seremos como Venezuela”.

– El último se vivió en la reunión del G20 en Buenos Aires, Argentina. Trump se molestó con la traducción y, sin más ni menos, decidió botar el audífono al piso, al frente del presidente Mauricio Macri.