La empresa canadiense GLC Medical Inc ha desarrollado una nueva tecnología que al aplicarse a una prueba rápida puede detectar la presencia del virus de la COVID-19 y otras enfermedades como el cáncer.

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La prueba utiliza espectroscopia de impedancia electroquímica (EIS), una técnica utilizada principalmente en laboratorios de investigación para conocer sobre las propiedades de los materiales y las reacciones de los electrodos.

Cómo funciona la prueba

  • Para usar la prueba, se debe colocar un colector de saliva en la boca debajo de la lengua durante unos 30 segundos. Luego, esa muestra se mezcla con una solución y se coloca en un lector con un microchip.
  • El chip es leído por un sensor, y los resultados se muestran en una computadora en segundos.
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  • Donna Mandau, fundadora, presidenta y directora ejecutiva de GLC Medical, dice que la compañía está explorando técnicas para usar la prueba para detectar otras enfermedades, como el VIH, la malaria y el ébola.
  • De acuerdo con Mikolai Vajda, un técnico de laboratorio, la prueba puede utilizarse para otros virus o agentes patógenos que se encuentren en el cuerpo humano.
  • Según Mandau, esta prueba tiene el potencial para detectar enfermedades como el cáncer.
  • La compañía anunció que se encuentra en la espera de una alianza con un socio comercial para fabricar las pruebas rápidas a mayor escala.

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