En su alocución de la mañana de este martes, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que se llegó a un acuerdo con la compañía Tesla para que esta ponga instalaciones en el territorio nacional y haga una inversión importante para el país.

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Muchos estados habían mostrado los beneficios que podría tener Musk si llegaba a construir en sus territorios, teniendo en cuenta que eso significaría mejor infraestructura y trabajo para miles de ciudadanos. Sin embargo, el estado que se ganó la locación fue Nuevo León, un lugar que había sido prácticamente descartado por el mandatario.

“Van bien las cosas. Platicamos ayer con el señor Elon Musk, director de Tesla. Ya hay un entendimiento. Sí van a dedicar la inversión a México y se va a establecer la planta en Monterrey con una serie de compromisos para enfrentar el problema de la escasez de agua. Ellos van a ayudar en este sentido”, señaló Obrador.

Resulta que Nuevo León tiene un problema por la escasez de agua, una problemática que tiene a la sociedad en vilo. Ante esta situación, Musk se comprometió con Obrador para trabajar con agua reciclada.

El mandatario dijo: “Hay un primer compromiso que es el del uso en todo el proceso de fabricación de automóviles eléctricos, la utilización de agua reciclada y de tratamiento”.

Además, el presidente resaltó los esfuerzos del gobierno federal para darle solución a esta problemática, diciendo que “se está invirtiendo en la Presa Libertad y en la construcción del acueducto El Cuchillo II y esto va a resolver el problema de corto plazo”.

Se estima que la inversión con la que llegaría Musk a México rondaría 10 mil millones de dólares y tiene el potencial de transformar la base industrial, no solo de Nuevo León sino de todo el país.

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Tesla tiene un objetivo para este 2023: hacer autos más económicos para que personas todo tipo de condiciones los puedan adquirir. Para poder cumplir con ese propósito, México es una de las mejores opciones en todo el mundo.

México tiene los costos de producción más bajos a nivel mundial para la producción de automóviles de alta gama y con calidad; tan solo en el pago de mano de obra, el país es 26.1 por ciento más barato comparado con China, según un estudio de las consultoras Thomson Reuters y Baker Tilly.

Además, buscar aprovechar el crédito fiscal que ofrece Estados Unidos para la elaboración de autos eléctricos siempre y cuando se ensamblen en Norteamérica.