El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, fue uno de los primeros en reunirse con ejecutivos de la compañía de autos eléctricos, aunque la expectativa de que Tesla instale una planta de producción en México está desde octubre del año pasado, luego de que Musk visitara Nuevo León y se reuniera con Mariana Rodríguez, ‘influencer’ y esposa del gobernador del estado, Samuel García.

Sin embargo, en los últimos días la posibilidad se confirmó luego de la llamada que tuvo el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, directamente con el magnate estadounidense para definir su ubicación exacta.

“Es una muy buena noticia. Nosotros agradecemos a esta empresa el que decida instalarse en nuestro país. México es de los países, si no el primer lugar, (que) está entre los tres países con más oportunidades para la inversión extranjera y para la creación de empresas”, declaró en su rueda de prensa diaria el pasado 20 de febrero.

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¿La planta de Tesla estará en Nuevo León?

El gobierno del norteño estado mexicano pretende ser el destino, pero ya hay disputa con López Obrador, que no quiso confirmar esa ubicación con el argumento de evitar la escasez de servicios básicos como el agua y la luz eléctrica.

“Hay ya lugares en el país donde no se tiene agua suficiente y tenemos que cuidar el agua para el consumo doméstico y uno de los estados que tienen problemas por falta de agua es Nuevo León”, aseveró el mandatario.

Su declaración ocurre pese a que la semana pasada el gobernador de Nuevo León, el opositor Samuel García, afirmó que en los próximos días Tesla anunciaría su llegada al estado, fronterizo con Texas (EE.UU.) y polo industrial del país.

Cuestionado por la prensa sobre si su Gobierno no quiere que la planta se instale en ese estado, que Musk visitó el año pasado, AMLO respondió que “en Nuevo León no hay agua” para abastecer los procesos de la empresa. “El gobernador está haciendo su trabajo muy bien, pero tiene que haber una planeación nacional”, sentenció.

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Hay otros gobiernos que están detrás de esa posibilidad, y ya comenzaron a destacar los beneficios de cada uno de sus territorios. La disputa comenzó entre los estados de Nuevo León, en el norte; Hidalgo, en el centro, y Michoacán, en el pacífico, pero se han ido sumando otros.

AMLO explicó que, por ahora, su principal opción para instalar la planta de Tesla es en el estado de Hidalgo en la zona cercana al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), que él inauguró el año pasado y que su Gobierno ha intentado consolidar, mientras que otra propuesta sería el sureste del país, región prioritaria para su administración.

“Claro desde siempre se ha propuesto el que se mantenga la población, que se oriente el crecimiento de población hacia las costas, sobre todo del Golfo, porque se tiene el agua“, indicó.

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A la pregunta expresa de si ya está la decisión tomada sobre el destino final de Tesla, López Obrador afirmó que aún no se ha decidido nada.

Por eso, desde Veracruz, la alcaldesa Paty Lobeira de Yunes se metió en la pelea y ofreció a los inversionistas suficiente agua y electricidad para que la fábrica opere sin contratiempos.

Además, destacó que el puerto ofrece una geolocalización privilegiada para el traslado de mercancías a todo el país y al extranjero, así como tecnología de todo el mundo, que garantizaría la llegada de piezas y herramientas a menor costo:

“Contamos con la infraestructura portuaria más importante de todo el sureste mexicano, tenemos las instalaciones idóneas y personal calificado para el traslado de vehículos. Tan es así que ya superamos los 40 años de experiencia transportando automóviles hacia los Estados Unidos, Europa y Sudamérica”.

Mientras tanto, Michoacán no se quedó atrás y se apuntó en las últimas horas en la puja por ser el destino de la empresa de Musk, también destacando todas sus posibilidades para instalar la planta.

El gobernador de Michoacán aseguró a la Cancillería mexicana, que encabeza los diálogos con la compañía del también dueño de Twitter, que este estado del oeste del país “cuenta con energías limpias suficientes, recurso hídrico y una posición logística inmejorable”.

Ramírez explicó que Michoacán cuenta con al menos dos lugares idóneos para ser sedes de la nueva planta de Tesla:

  • Uno de ellos, de 640 hectáreas, en la Isla de la Palma, perteneciente a la Secretaría de Marina mexicana y que administra el puerto de Lázaro Cárdenas, uno de los más importantes del país y que tan solo en 2022 incrementó su exportación de vehículos en 30 %.
  • La otra zona podría ser en el Parque Bajío, que tiene 440 hectáreas y se ubica sobre la autopista México-Guadalajara, en la Estación Queréndaro, la cual, dijo, “cuenta con vías de ferrocarril que vienen de Lázaro, con acceso directo a la carretera federal y a 7 kilómetros del aeropuerto”. Ramírez dijo que tan solo en Parque Bajío se cuenta con un millón de metros cúbicos al año, “algo que no tienen otros estados”.

Además, subrayó que el puerto de Lázaro Cárdenas es la principal conexión entre los mercados de Norteamérica y Asia, “por lo que es un serio candidato para ser sede de Tesla, así como de otras firmas de clase mundial”.

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También se conoció el interés en Tamaulipas, en donde la Federación de Cámaras de Comercio (Fecanaco), iniciativa privada del norte del estado, expuso esta propuesta al dueño de la también compañía Space X ofreciéndole el suficiente terreno y el agua para aterrizar su proyecto.

“Tamaulipas no tiene problemas de agua y al ser frontera se reducen los costos de transporte a Estados Unidos, ya que desde el Aeropuerto Felipe Ángeles el traslado de la producción sería muy costoso. Vamos a buscar a Elon Musk y hacerle esta propuesta”, dijo el titular Julio Almanza Armas, citado por ABC Noticias.

Ese medio señaló también que el anuncio oficial de la llegada de Tesla a uno de esos estados se haría el próximo primero de marzo, “justo cuando la automotriz celebra su Día del Inversionista”, poniendo fin a todas las especulaciones

De acuerdo con fuentes cercanas a la negociación entre autoridades estatales y directivos de la armadora de autos eléctricos, con esto terminarán las especulaciones sobre el lugar donde se instalará la planta, que representa una inversión aproximada a los 10 mil millones de dólares.

“Ingresar a México es parte de una estrategia mundial para producir 20 millones de vehículos eléctricos para el 2030, reveló el mismo Elon Musk en agosto del año pasado”, recordó el portal.

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