Según algunos testigos, un joven de 19 años, cuya identidad no ha trascendido, hizo sus necesidad fisiológicas al aire libre, en un lugar dentro del mencionado campo. Al verlo, dieron aviso a los guardias del museo que, a su vez, llamaron a la policía, informa Independent.
Luego de ser detenido por las autoridades, el joven estuvo bajo custodia varias horas antes de ser liberado, no sin antes ofrecer una disculpa voluntariamente y conocer que tendría que pagar 1.500 dólares (algo más de 4 millones de pesos colombianos) por su fechoría, agrega BBC.
El incidente ocurrió la semana pasada, y de acuerdo con la información ofrecida, el joven estaba como turista en Polonia junto a otros estudiantes cuando ocurrió el incidente.
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En enero de este año había ocurrido otra profanación en Auschwitz (mucho más grave, a ojos de varias personas), cuando 12 personas que se manifestaban contra la guerra se desnudaron y mataron una oveja frente al campo de concentración. Como era de esperarse, fueron condenados por el acto.
Según la ley polaca, profanar un monumento o algún lugar público que sirva para conmemorar algún hecho histórico es penalizado con multas o, incluso, con la cárcel.
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