Hay una gran sorpresa e indignación en Costa Rica, ya que el fin de semana pasado se presentó un hecho sin precedentes en la ciudad de Cartago, en el país centroamericano.
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Resulta que una menor de 13 años de edad iba caminando con su hija por Mata de Guineo en Alvarado, Cartago, vendiendo unos boletos para una rifa y, de la nada, un hombre salió de un sembradío, le quitó la bebé y comenzó a correr por una zona de fincas cerca de allí.
De inmediato la joven corrió hacia donde unos familiares cercanos al lugar para advertirles lo que había pasado y estos, además de dirigirse hacia la zona por la que había huido el hombre, llamaron al servicio de emergencias para pedirle ayuda a la policía.
Pese a que la comunidad actúo de manera rápida y llegó hasta la zona donde se había escabullido el implicado, no hubo respuestas y ni el sospechoso ni la bebé volvieron a aparecer.
Según la prima de la víctima, Marjorie Montes, “ella lo que dice es que iba caminando y la bebé se puso a llorar porque iba incómoda en el coche, entonces se detuvo para acomodarla y el muchacho que salió le pateó el coche, le quitó a la niña, la empujó y salió corriendo”, explicó a Diario extra.
“Para nosotros es muy frustrante, uno tiene hijos y tal vez eso nos puede pasar, entonces hay que ayudar y ponerse la mano en el corazón. Todos estamos muy sorprendidos porque nadie se espera esta situación”, manifestó Juan Carlos Ramírez, vecino que socorrió a la joven para el mismo medio.
Padrastro de la menor es el principal sospechoso
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuvo a un sospechoso de apellido Cassasola, de 34 años, quien figura como el padrastro de la menor de 13 años y un juzgado le dictaminó seis meses de prisión preventiva debido a que es investigado por abuso y tiene pendiente una prueba de ADN para determinar si es el padre de la bebé raptada.
El director del OIJ, Randall Zuñiga, señaló que la principal hipótesis es que Cassasola raptó a la bebé con el fin de evitar la prueba de paternidad y “evadir la justicia”.
“A él le corresponde una cita para determinar la prueba de paternidad, es una de las hipótesis que manejamos como móvil del rapto de la menor. La prueba siempre se va a realizar independientemente de que tengamos a la bebé”, señaló.
La ministra de la Niñez y la Adolescencia, Gloriana López, indicó que está investigando si las instituciones políticas y el Estado entregaron una respuesta integral y tomaron medidas de protección para las menores de edad.
“Todo el país está consternado por la desaparición de la niña de 9 meses, hija de una preadolescente de 13 años, que también es una niña. Dos víctimas, una de secuestro y otra de abuso”, expresó López.
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“No más normalización de la estas conductas, de las relaciones impropias, del embarazo en adolescentes y otras formas de abuso. La violencia no es normal, hay que denunciarla y proteger a las personas menores de edad que son víctimas”, agregó la ministra.
Asimismo, lamentó que “niñas no tuvieron un entorno protector en su familia, en su comunidad o en sus grupos cercanos” y que “por el contrario estuvieron expuestas al descuido y a la negligencia extrema”.
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