La foto era ofrecida en eBay simplemente como una “Polaroid del siglo XIX”, pero la persona que aparecía en ella se le hacía muy similar a James, una figura muy representativa del viejo oeste de Estados Unidos, tema al que Whiting es aficionado, según Fox News.
Según contó el afortunado comprador, en la página de internet se veía muy borrosa la fotografía, pero aun así la compró. Cuando la tuvo en su poder, se dio cuenta de que la similitud que él había visto era mucho más clara.
Sin embargo, todavía dudando y siguiendo el consejo de algunos amigos, el coleccionista consultó a algunos expertos sobre la autenticidad de la foto, la cual no solo fue confirmada, sino que también le indicaron que su costo podría ser de al menos 2 millones de dólares (cerca de 6 mil millones de pesos colombianos).
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Will Dunniway, experto en fotografía del siglo XIX establecido en California, coincidió al evaluar la autenticidad del centenario retrato, y dijo que este había sido tomado cuando James tenía apenas 14 años de edad. El forense Kent Gibson, en Los Ángeles, llegó a la misma conclusión, dice BBC.
Las imágenes de los delincuentes famosos de esa época son muy escasas, y eso explica que las que se venden hoy en día sean tan costosas. Fox recuerda el caso de un retrato del delincuente ‘Billy the Kid’, que fue vendido en 2,3 millones de dólares en 2011, y otro del mismo hombre con su banda, captada en 1878, que costó 5 millones de dólares.
Jesse James fue un delincuente muy famoso en Estados Unidos en el siglo XIX, y murió asesinado por uno de sus compañeros de banda. Con el paso de las décadas, la historia de su vida se ha convertido en un argumento recurrente para varias películas, que han ayudado a aumentar su leyenda y la comparación que muchos hacen con el famoso ‘Robin Hood’.
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Estados Unidos lanzó fuertes críticas al presidente Gustavo Petro durante la más reciente sesión del Consejo de Seguridad de la ONU, en la que se presentó el informe trimestral sobre la paz en Colombia. El representante estadounidense, Mike Waltz, acusó al Gobierno de usar “retórica incendiaria” y de impulsar políticas que, según Washington, socavan los avances hacia una paz duradera. Además, cuestionó la ampliación del mandato de la Misión de Verificación, señalando que se ha desviado de su objetivo inicial —la desmovilización de las Farc— para centrarse en lo que calificó como “prioridades políticas excesivas”, como la JEP y el apoyo a minorías étnicas.
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