Un taxista protagonizó un hecho heroico en Reino Unido, cuando encerró dentro de su taxi a un terrorista que pretendía ingresar un artefacto explosivo al Hospital de Mujeres de Liverpool, informó el Daily Mail.
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El conductor del vehículo fue identificado como David Perry, de 45 años, y de acuerdo con lo relatado por un amigo suyo, a ese mismo medio, un hombre se subió en el taxi y le pidió ser llevado al Servicio de Conmemoración de la ciudad en la Catedral Anglicana de Liverpool.
Al ver que había mucho tráfico y las carreteras estaban bloqueadas, el pasajero, que aún no ha sido identificado formalmente, decidió desviarse y pidió ir al centro de la ciudad, pero al ver el Hospital de Mujeres le dijo al taxista que se estacionara allí.
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El amigo de Perry reseñó el relato del taxista al Daily Mail y dijo que cuando este iba manejando, notó un tipo de luz que estaba pegada a la ropa del terrorista, mientras este la maniobraba.
“No sé cómo lo hizo, pero con un pensamiento de una fracción de segundo, David saltó y cerró el auto con este tipo en la parte de atrás. Tan pronto como lo hizo, detonó”, dijo el amigo de Perry a ese medio.
Además, agregó que milagrosamente no hubo ninguna víctima en el atentado y que Perry solo sufrió cortes, golpes menores y daños en el tímpano, pero fue dado de alta rápidamente.
Como respuesta, la policía terrorista adelantó varios operativos en toda la ciudad, logrando capturar a 3 hombres de 21,26 y 29 años que estarían presuntamente relacionados con los hechos. Además, entre las hipótesis que manejan, no consideran que el ataque estuviera dirigido hacia el hospital.
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