Los fallecimientos diarios habían disminuido a alrededor de 1.500 el domingo y el lunes. No obstante, la Universidad Johns Hopkins contabilizó este martes un total 2.228 muertes asociadas a la enfermedad respiratoria.
De esta manera, la pandemia del coronavirus ha cobrado hasta el momento la vida de 25.757 personas en Estados Unidos, siendo el país más golpeado con el brote en todo el mundo, por delante de Italia, España y Francia.
La nación norteamericana también tiene desde fines de marzo el mayor número de casos de contagio declarados oficialmente, y cruzó este lunes la marca de los 600.000 infectados. Además, las autoridades locales han realizado alrededor de 3 millones de pruebas en el país.
El epicentro del virus estadounidense todavía se encuentra en Nueva York, donde también se presentó un aumento en los decesos. En ese estado se registraron este martes 778 muertes en las últimas 24 horas, por encima de las 671 del día anterior, elevando a 10.834 el número total de fallecidos.
De acuerdo con las predicciones, el número de muertes en los Estados Unidos, teniendo en cuenta cómo ha evolucionado el coronavirus en China y Europa, alcanzaría la cifra de los 70.000 decesos.
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