“Dos especialistas sucumbieron a sus heridas“, anunció el ministerio de Defensa, luego del accidente en la base Nionoska, en un comunicado citado por las agencias de noticias rusas.
“Los sensores de Severodvinsk registraron un leve aumento en la radioactividad, pero que luego ha vuelto a su nivel normal“, señaló el ayuntamiento de la ciudad de Severodvinsk en un comunicado.
El ministerio de Defensa ruso había asegurado previamente que “no había contaminación radioactiva”, y que “los niveles eran normales”.
El accidente se produjo cuando se estaba haciendo un test de un “motor-cohete a ergol líquido (propulsante)“, según el informe del ministerio de Defensa.
La de Nionoska es una base militar de pruebas de misiles de la flota rusa, inaugurada en 1954. En ese lugar se hacen tests de misiles balísticos.
Esta semana, el ejército ruso ya sufrió un incendio en un depósito de municiones en la región de Krasnoyarsk, en Siberia, que dejó un muerto y al menos ocho heridos.
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