La joven paisa, una diseñadora gráfica de la Pontifica Bolivariana de Medellín, le contó a Noticias Caracol la tragedia que está viviendo por estos días.
Su novio le había propuesto matrimonio después de que habían vuelto de Colombia a Baltimore, en Maryland. En ese paseo, Russell conoció a la familia de Natalia y se convenció de pedirle la mano, señala ese informativo.
Lastimosamente, un hecho inesperado dañó completamente los planes de vida que tenía la joven antioqueña. Primero, retrasó los planes de la boda y luego su ya prometido falleció por un ataque cardiorespiratorio, indica Noticias Caracol.
Con la tristeza por la súbita muerte de su prometido, la colombiana ahora tiene el problema de que no puede trabajar y su tiempo como turista en EE. UU. se está acabando, por lo que no sabe cómo regresar a nuestro país.
“Desde que llegué (a Baltimore) mi sustento había sido Russell, a nivel económico, emocional. Él ha sido todo. Era una persona demasiado amorosa, pendiente de mí. Desde el primer momento lo consideré mi ángel sin saber que se iba a convertir en mi ángel”, declaró Natalia Vanegas a Noticias Caracol.
A pesar de que cuenta con el apoyo de la familia de Russell, sabe que con el tiempo “no es fácil sostener a alguien que no puede generar ingresos”.
Según el informativo, Natalia Vanegas ahora hace parte del grupo de unos 3.000 colombianos que están varados en el mundo y que no saben cómo regresar a Colombia, debido a que las fronteras aéreas están cerradas por la pandemia del coronavirus.
“¿Estoy aquí preguntándome por qué? ¿Este momento? ¿Planes? Todo junto es una pregunta ahora, perderte no estaba en mis planes, quiero todo contigo, despertarme con un beso todos los días y te amo”, escribió Natalia Vanegas a modo de despedida en su Facebook.
* Esta nota fue corregida y actualizada por pedido de Natalia Vanegas, quien se contactó con Pulzo para detallar que su prometido, Russell Hill, nunca estuvo contagiado de COVID-19.
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