El presidente  de El Salvador, Nayib Bukele, informó que el Gobierno de ese país trasladó el pasado viernes a 2.000 supuestos pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT).

La nueva megacárcel, ubicada en un valle rural en las afueras de la ciudad de Tecoluca, 74 km al sureste de ese país centroamericano, fue inaugurada por el mandatario a comienzos de febrero de 2023.

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Acerca de esa prisión, calificada como la “más grande de América” por las autoridades salvadoreñas, se conoció que les exigen pago a los reclusos por accesorios y demás en ese lugar, informó Prensa Libre, de Guatemala.

“Son siete pequeños paquetes cuyos contenidos no aparecen detallados en las hojas que los carceleros han pegado en los muros de las prisiones. Los familiares solo saben que dan 35 dólares por alimentación, 15 por artículos de higiene, 30 por vestimenta, 20 por limpieza de área y 70 por misceláneos”, publicó el portal guatemalteco, en replica a la investigación de Infobae sobre el tema.

El pago de esos productos de primera necesidad son responsabilidad de los allegados de los prisioneros en el Centro de Confinamiento del Terrorismo desde diciembre de 2022.

Según las cifras oficiales, replicadas por Efe, bajo el régimen de excepción, aprobado en marzo pasado tras una escalada de asesinatos, se ha detenido a más de 64.000 personas a quienes el Gobierno acusa de ser pandilleros. Aún así, se han liberado a más de 3.300.

La nueva prisión tiene 23 hectáreas de construcción y Amnistía Internacional (AI) expresó su “profunda preocupación”, debido a que “la construcción de esta nueva prisión podría suponer la continuidad y el escalamiento de estos abusos”.

Este fue el trino con un video que llevó a que el presidente salvadoreño Nayib Bukele les enviara un mensaje a los reclusos que llegaron a ese nuevo centro.

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