En los últimos días se ha visto a Sara Uribe muy afectada por varios temas, tanto por ataques en redes, como por la situación y las elecciones en Colombia. Sin embargo, parece que su estado emocional es una combinación de muchas cosas y que empieza por la salud de su madre; Beatriz Cadavid.

En una serie de historias de Instagram, la exintegrante de ‘Protagonistas de Nuestra Tele’ contó la enfermedad de su mamá y lo que ha pasado recientemente con ella.

La historia de Sara Uribe y los problemas de salud de su mamá

El relato empezó con comentarios sobre salud mental y los problemas que puede pasar cualquier persona con ansiedad, adicciones, depresiones, problemas físicos, médicos y demás. Posteriormente, Uribe habló del amor en su vida y lo que ha hecho y dado por demás personas, en ese punto se notó muy emotiva y nostálgica.

En ese punto, empezó a contar el caso de su mamá, la fibromialgia (que es un dolor muscular y óseo intenso, además de fatiga y problemas de sueño) que la aqueja hace un tiempo: “Mi mamá sufre de fibromialgia y lleva muchísimos años consumiendo medicamentos para el dolor, esos medicamentos ya no hacen efecto en su cuerpo. Eso genera una ansiedad y adicción muy fuertes, ojalá tú no estés pasando por esto.

No solamente está enferma mi mamá, estamos enfermos en la familia, los hijos, y nos duele verla con este dolor, pero también duele verla adicta a una droga que ya no le está haciendo efecto”, explicó la bella modelo.

(Vea también“Que Dios nos proteja”: Sara Uribe mandó mensaje para las elecciones presidenciales)

Después, Sara empezó a contar lo que ha pasado en los últimos días, que la ha marcado y llevado a desahogarse así. Además, reveló lo que ha pasado con médicos e instituciones como Incodol (Instituto Colombiano de Dolor) y el personal de la salud que ha atendido a la señora Beatriz:

“Hace tres días estuve en la clínica, durmiendo con ella, pero yo le meto actitud a la vida y – qué va, qué hieju?#+@5 -, de esta salimos… Gracias a Incodol, todas las enfermeras, a toda la gente que nos ayuda siempre cuando mi mamá tiene una crisis de fibromialgia.

Somos bendecidos porque yo ‘toco la puerta’ y ‘se abre’, pero hay muchas personas que no les pasa lo que a nosotros… Quizás tengo estas redes para mostrarme como soy, por lo que paso”

Pero todo llegó a un punto crítico el pasado domingo 22 de mayo, en una clínica del departamento de Antioquia y así lo contó Sara: “Mi mamá salió de hospitalización, salimos de Incodol y nos tocó ir a la clínica Samein (Salud Mental Integral), que es una clínica en la que atienden a personas con enfermedades mentales… Mi mamá tenía mucho miedo, mucha ansiedad, yo también… Llegamos a la clínica, mamá se fue en una ambulancia y yo me fui detrás, en el carro. Llegamos a la Clínica Incodol y… ¡Oh, sorpresa!

Íbamos llenas de miedo, teníamos mucho miedo, no quería que a mi mamá la dejaran hospitalizada allá, ella no quería quedarse allá…”.

En ese punto se interrumpió el relato de Sara en cámara, porque se empezaron a ver videos del sitio en el que su madre iba a quedar internada; un ambiente muy triste y complicado, tal como se vive en tantas instituciones de salud del país.

Estas fueron las descripciones de la presentadora y modelo en textos que acompañaron las imágenes:

“Acá llegamos, buscando un auxilio, una ayuda, un ángel que nos recibiera con un abrazo y nos dijera que todo va a estar bien. La salud mental necesita atención y necesita amor, amor del bueno.

Esta fue la entrada y el recibimiento, yo no quería llorar, estaba fuerte y llena de Dios. Pero ahí no la iba a dejar.

Ese día estaba lleno de gente este lugar, los doctores estaban saturados de trabajo, solo había un chico que con su amabilidad, no sabía qué hacer con tanta gente. Y, fuera de eso, me encontré con el miedo y el desespero, y pues, la verdad, se me salió el ‘¿usted no sabe quién soy yo?’.

(Le puede interesar: Sara Uribe no aguantó más descalificativos en redes; respondió al borde de lágrimas)

Para mí, las rejas son algo frustrante y me dolía el corazón de ver tanta gente sufriendo. Llegaron personas tristes, con dolor en su corazón, un auxilio, una ayuda”

Aunque había mostrado y revelado las instalaciones, el poco personal y las condiciones adversas, Sara Uribe no se guardó las críticas:

“Este doctor le habló con amor, la escuchó y la entendió. Pero, ¿saben qué me dolió?, ver las instalaciones de un lugar que debería ser luz, ser como el cielo para muchos que lo necesitamos…

Yo también sé qué es el dolor. El dolor de no tener a mi madre siempre, de no poder verla mover libremente, de que sufra de depresión, teniéndolo todo. De que yo, a veces, no sepa qué hacer para calmarle el dolor.

… Esto me ayudó a entender al prójimo, entender el dolor de otro. Hay unos que sufren físicamente y otros psicológicamente”

Después de todo su desahogo, la paisa hizo una reflexión sobre el dolor físico y el dolor psicológico, mostrándose muy afectada por las situaciones mencionadas y por eso hizo un llamado a los ‘influencers’ y al propio estado colombiano:

Lee También

“Necesitamos más amor, que le crean a las enfermedades mentales. No es justo que estemos en un país, donde tengamos que buscar este tipo de ayudas por fuera, y que lleguen personas tan desesperadas. Aprovecha esta oportunidad, no para ser un ‘influencer’ de marcas, sino un ‘influencer’ de amor. Para llenar al mundo de amor… Y a nuestro estado, que vean que las enfermedades mentales hay que atenderlas, y las instituciones tienen que prestar un buen servicio. Porque estamos jodidos con esto, necesitamos paz, no miedo”

Al final, la señora Beatriz Cadavid no tuvo que quedarse en las instalaciones que mostró su hija, pero este relato refleja lo difícil que es pasar por estas situaciones y la falta de comprensión y condiciones para atenderlas.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por La chismosa (@la_chismosa_news)