El cantante estadounidense Brian Warner, más conocido como Marilyn Manson, fue denunciado en Nueva York por abusar de una menor de edad, en 1995. De acuerdo con la demanda, el artista habría atacado a una chica, de 16 años, cuando él tenía 26 e inicia su carrera musical.

Este caso habría sido tomado en cuenta por las autoridades gracias a una ventana legal que permite temporalmente juzgar este tipo de delitos, hasta ahora, prescritos.

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La mujer, que no fue identificada, relató a las autoridades que Manson la conoció en un concierto, y además de abusarla, la habría manipulado hasta 1999 bajo el auspicio de ejecutivos musicales y con la colaboración de sus socios.

La denuncia también implica a los sellos discográficos del artista, Interscope Music y Nothing Records, que están acusados de “celebrar y promover” las “obsesiones pedófilas y comportamientos violentos” de Warner “para su ganancia financiera colectiva”.

El documento, divulgado por los medios estadounidenses, indica que la denunciante era virgen cuando el cantante la abusó por primera vez en el autobús de gira y en presencia de un miembro de su banda, y agrega que después la humilló, la amenazó con matarla a ella y a su familia si se lo contaba a alguien y la echó de malas maneras.

Pese a ello, el cantante contactó con la víctima para chatear con ella, pedirle fotos explícitas para su club de fans e invitarla a más conciertos, lo que la llevó a viajar a “numerosas ciudades y estados, incluyendo Nueva York”, y a ser invitada a la zona de bastidores y el autobús de gira.

En 1999, durante unas cuatro semanas en una gira, Manson supuestamente la forzó de nuevo a estar con él, y “a menudo” la obligó a hacerlo con “él y otros miembros de la banda o su asistente a la vez”.

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“Como es típico con un depredador, el acusado Warner siguió ejerciendo poder y autoridad para mantener control sobre la denunciante. Como resultado de su comportamiento opresivo y constante, la denunciante fue incapaz de defender y salir del abuso”, agrega.

La denuncia también indica que, en 2021, la víctima publicó su relato en internet y sufrió represalias, y cree que el acusado y su esposa están recurriendo a un canal de YouTube que desacredita a mujeres que lo han acusado de abusos para intentar acallarlas.