El CEO de Tesla nació en Pretoria, Sudáfrica, el 28 de junio de 1971. Es hijo Errol Musk, un ingeniero y promotor inmobiliario, y de Maye Musk, una modelo canadiense.

En varias oportunidades el empresario ha contado que no tuvo una infancia fácil ya que los problemas reinaban en su hogar. Su padre sometió a abusos físicos y psicológicos a su madre por un buen tiempo, hasta que ella pidió el divorcio.

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Por su parte, Errol reveló recientemente a AFP que: “Fui un padre estricto. Mi palabra era ley”, y que, según él, eso fue lo que desarrolló la ambición de Elon. “Era nuestra forma de ser. Nos esforzamos en dar lo mejor de nosotros mismos”, explicó el hombre de 76 años.

La relación entre ellos no es la mejor, y el ingeniero se refirió a un hecho que terminó de alejarlos: “A Elon esto no le pareció bien. Yo me tomo la vida como llega”, señaló Errol. Pero, ¿a qué se refería?

El escandalo familiar que alejó a Elon Musk de su padre

En 2018, se conoció el motivo que llevó al empresario multimillonario a poner un muro de por medio en la poca relación que tenía con su papá. En una entrevista con la revista Rolling Stone, Elon Musk lo describió como un “ser humano terrible”.

“No tienes idea de lo malo que es”, dijo Musk. “Casi todos los delitos, que posiblemente puedas pensar, los ha cometido. Casi todas las cosas malvadas en las que podrías pensar, él las ha cometido”.

De acuerdo con el magnate, la conexión padre e hijo se comenzó a deteriorar desde que él estaba pequeño. Sin embargo, hace cinco años ocurrió algo que le fue muy duro de asimilar. En 2017, Errol se involucró sentimentalmente con su hijastra, de 30 años, y tuvieron un hijo.

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El padre de Elon se casó con Heidi, una mujer que en ese momento tenía una hija de cuatro años llamada Jana. La pareja estuvo casada por 18 años y producto de esa relación nacieron dos niños, hasta que finalmente decidieron separarse.

Al pasar los años, Jena contactó a su padrastro después de terminar con su novio. “Estábamos solos, éramos personas perdidas”, dijo Errol a la revista. “Una cosa llevó a la otra; puedes llamarlo el plan de Dios o el plan de la naturaleza”.

Asimismo, el sudafricano aseguró que nunca vio a Jena como su hija porque fue poco el tiempo que vivió con él y su madre.