La Procuraduría General de la Nación empezó a tomar acciones, luego del escándalo en la cárcel La Picota, en Bogotá, donde tres artistas fueron contratados para cantar en un evento en el que se decomisaron más de 200 botellas de whisky, 122 celulares, 19 parlantes, una mesa de juegos de casino y 400 millones de pesos.

Desde la entidad informaron que adelantan la investigación para establecer qué pasó con los funcionarios del Inpec, encargados del pabellón de extraditables, durante la parranda a la que asistieron los cantantes ‘Mono Zabaleta’, ‘Churo’ Díaz y Ana del Castillo.

De hecho, el ente citó a estos artistas s a una declaración juramentada para determinar cómo ingresaron a la cárcel y si recibieron algún pago por ello.

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Ana del Castillo: representante entregó versión del evento en La Picota

Así la situación, en el periódico El Tiempo hablaron con la representante de la cantante, quien dio detalles de lo ocurrido en la prisión ubicada en la capital del país.

Según Gadir Gómez, una persona particular, al parecer familiar de uno de los convictos, fue la encargada de invitar a los artistas al evento pago.

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Si bien la ‘manager’ hizo énfasis en que cada “cantante es libre de asistir a donde le paguen”, dejó claro que no tuvo nada que ver con el ingreso de artículos o bebidas alcohólicas.

Nos esperó en la puerta de la cárcel. Cuando llegamos, encontramos unos formatos, nos registramos y ahí estaba la lista de los cantantes que iban a asistir y no son todos vallenatos”, dijo.

Y añadió: “El alcohol y la comida ya estaban adentro, no ingresó con nosotros. Fuimos a una celebración que es de conocimiento público… Cualquier cantante es libre de asistir en donde le paguen”.