El esperado anuncio sobre cuál sería la fórmula vicepresidencial de Gustavo Petro se dio finalmente esta semana. El candidato del Pacto Histórico, aunque se demoró en informarlo, eligió a Francia Márquez, que obtuvo la segunda votación (más de 780.000 votos) dentro de su consulta. Parecía que ella significaba sumar, pero, después de sus primeras declaraciones, puso a correr a Petro.

Márquez empezó su campaña atacando al director del Partido Liberal, César Gaviria, de quien dijo que era un neoliberal y que representa el continuismo y la vieja política. Esto no tendría nada de extraordinario si no fuera porque Petro viene en conversaciones con el expresidente para que esa colectividad política adhiera a su campaña (representa unos dos millones de votos mal contados).

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Pero esa intención saltó en pedazos después de las declaraciones de Márquez. El expresidente Gaviria dijo que con lo que había dicho ella se hacía imposible continuar en conversaciones con el Pacto Histórico. Petro trató de matizar y en un trino reconoció el liderazgo político de Gaviria y la posibilidad de seguir hablando.

Sin embargo, Márquez insistió en su postura y aseguró este jueves que en la posición de Gaviria no hay nada nuevo, pues simplemente está usando sus declaraciones para confirmar su verdadero interés: ir a apoyar la campaña de Federico Gutiérrez, y que ella también incomoda por ser una “mujer negra empobrecida”.

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Eso apretó aún más el nudo que ahora parece imposible de desatar, y que hace pensar a Petro en otras posibilidades para lograr su propósito de llegar al poder. Eso quedó claro este mismo jueves cuando él y Márquez se reunieron con la bancada del Pacto Histórico en el Congreso, recién elegida en los comicios legislativos del pasado 13 de marzo.

Ante la nueva postura de Gaviria, Petro se refirió a posibles nuevas reuniones y alianzas políticas. De acuerdo con Semana, un nombre que salió a flote fue el del expresidente Juan Manuel Santos, de quien Petro “exaltó” su legado y “lo consideró necesario en su proyecto”.

“Pienso que hay que hacer un gran acuerdo. Es parte de lo que estábamos hablando para revitalizar completamente la opción de la paz en Colombia. La paz grande, definitiva y permanente está a la vuelta de la esquina. Se puede hacer si las gentes de Colombia, que quieren la paz, se juntan”, dijo Petro, citado por la revista.

De acuerdo con esa publicación, cuando le preguntaron a Petro si en la búsqueda de su propuesta de paz se vislumbraba un encuentro con el expresidente Santos, el candidato del Pacto Histórico “dijo que se reuniría ‘hasta con [Álvaro] Uribe’ si se trata de temas relacionados con la paz”.

Las afirmaciones de Petro traen a la mente inevitablemente la vieja figura de la teoría política según la cual los extremos del espectro político terminan tocándose, o por lo menos pareciéndose.