Que parte de los dueños de Avianca pusieron dinero para comprar Viva Air y por eso están pidiendo desde hace meses la unión ya se sabía, pero lo que develó la SIC es que en esta unión habrían anormalidades.

La publicación hecha por La República tiene apartes del informe de la Superintendencia en la que mencionan que Castlesouth Limited, poseedor de los derechos políticos de la ‘low cost’, sí tiene relación con Avianca y que habría sido creada para materializar la integración.

Castlesouth Limited no sería un tercera entre Avianca y Viva Air, sino de “una persona jurídica que no desarrolla ninguna actividad económica”, dice la SIC, y que fue creada para que conservar los derechos y posteriormente radicarlos formalmente en IV1L, controlante de Avianca, añade el medio económico.

A pesar de que Viva Air cerró sus operaciones desde el pasado lunes y en diferentes medios de comunicación han dicho que de no ser aprobada su unión con Avianca desaparecerán, pruebas reservadas de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) evidencian que Viva ya está siendo controlada por Avianca.

Según las dos aerolíneas, si bien hubo una transacción para que Viva cambiara de dueño, los derechos económicos son independientes de los derechos políticos, y por ende no había control sobre la ‘low cost’. No obstante, para la SIC, tener los derechos económicos habría sido suficiente para constituir la integración empresarial entre ambas sociedades.

Según la Resolución 87164 de 2022, “la radicación de los derechos políticos derivados de las acciones de Viva Air y Viva Perú en un tercero, no impidió que se materializara la integración empresarial analizada. Esto es así porque la adquisición de los derechos económicos derivados de las acciones de Viva Air y Viva Perú habría sido suficiente para configurar la integración de esas compañías con Avianca (…) esta influencia material se habría evidenciado en las condiciones de las ofertas de Viva y la permanencia en el mercado de esas compañías”.

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Esta compra habría provocado que entre Viva Air y Avianca no hubiera una competencia, como sí era evidente antes, porque no habían mayores incentivos entre ellos y estarían actuando coordinadamente en beneficio de su controlante en común.

“Quienes adoptan y ejecutan las decisiones de competencia entre Viva Air y Viva Perú saben que las repercusiones económicas que se deriven de sus decisiones afectarán y le interesarán principalmente al grupo empresarial de Avianca (…) de esa manera debilitarían la posición del grupo empresarial al que se reportarán sus resultados económicos y al que tienen la expectativa de pertenecer formalmente en el futuro próximo”, dice la indagación.

La investigación de la SIC señala que los trabajadores de Viva Air sabían que, al final de cuentas, los intereses económicos iban para Avianca. “Quienes ocupan los cargos directivos y todos los empleados de Viva Air tienen conocimiento de que a partir del 29 de abril de 2022 los intereses económicos de la empresa recaen en el grupo empresarial del que hace parte Avianca. Además, desde dicha fecha tienen conocimiento de que eventualmente se tramitaría una solicitud de integración formal ante la Aerocivil con el fin de que Viva y Avianca pudieran formalizar los vínculos estructurales económicos que en la práctica ya tenían”, indica.

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Las dos partes interesadas en este proceso han dicho que la unión es la única solución para que la empresa pueda responder por todos los tiquetes y las demás labores que quedaron en deuda por el cierre intempesitivo de sus operaciones.

Por parte del Gobierno han explicado que entienden la situación de la aerolínea y se espera una solución antes de que se acabe esta semana, aunque la Fiscalía también los advirtió.

Las otras aerolíneas han mantenido silencio sobre lo que va a pasar con Viva Air, pero uno de los principales problemas que siempre han señalado es que una unión de Viva y Avianca crearía una monopolización del mercado, algo que las dos empresas desmienten.