En este caso de emergencia extrema, la vida y la integridad de los ocupantes del vehículo dependen de la capacidad del conductor de mantenerse tranquilo y reaccionar bien, a pesar del pánico de sus acompañantes y de lo apremiante de la situación.

El portal Rastreator brinda algunos consejos para estos momentos, que ojalá nunca sucedieran, pero para los cuales es mejor estar preparados. Como dice el refrán: “Espera lo mejor pero prepárate para lo peor”.

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  1. Calma y control. Que el conductor mantenga el control sobre sus nervios es clave a la hora de salir avante de una emergencia como quedarse sin frenos.
  2. Encienda las luces de parqueo para que los demás conductores vean que hay una emergencia.
  3. Deje de acelerar.
  4. Ponga un cambio más bajo, es decir, segunda o primera, si la velocidad del vehículo se lo permite. Es importante evitar que el carro tome demasiada velocidad. Ni piense por un momento dejarlo en neutro.
  5. A la mayor brevedad, orille el carro a un sitio seguro, como la berma de la autopista, hasta que el vehículo se detenga.
  6. Si se ve enfrentado a una curva (algo típico en las carreteras colombianas), no entre en pánico y tome el giro como lo haría normalmente, y no se deje asustar por el chillido de las llantas, pues es el caucho haciendo su trabajo de adherencia.
  7. Bombee el pedal del freno. A veces, el sistema de frenos coge aire y bombearlo lo puede aliviar, por lo menos durante la emergencia. Si es la bomba del freno la que falla, bombear el pedal la hace funcionar, también mientras la situación acaba.
  8. Con mucho cuidado, aplique el freno de emergencia. En esta acción hay que tener mucho cuidado, pues si se llaga a activar con fuerza, es posible que pierda el control del vehículo, así que es mejor ir aplicando y soltando, y así sucesivamente hasta detenerse por completo. El freno de emergencia por lo general es independiente del sistema de frenado, por lo cual es necesario mantenerlo debidamente graduado y en perfecto funcionamiento.

Cómo detectar una falla en el sistema de frenos

El vehículo por lo general ‘avisa’ si se va quedar sin frenos, por lo que debe estar atento de las siguientes señales:

  1. El freno es menos eficiente. Es decir, que el pedal se va más al fondo de lo normal antes de frenar.
  2. Se pone duro o requiere más fuerza del pie. Puede ser la bomba del freno que esté fallando.
  3. Si observa una baja en el nivel de líquido para frenos o ve que hay fugas (la llanta mojada por el lado interno o charcos de líquido en donde lo estaciona).
  4. Al frenar, el carro jala hacia un lado. Eso quiere decir que hay fugas de líquido o que las patillas o las bandas de un lado presentan un mayor desgaste.
  5. El freno se pone demasiado blando. También puede deberse a que se bajó el nivel de líquido por causa de una fuga.