El avance de la tecnología y lo fácil que se pueden hacer ahora muchos trámites bancarios, a través de Internet, han llevado también a que los estafadores tengan herramientas más efectivas. .
Esta situación se ha hecho problemática y ha conllevado a que decenas de personas terminen siendo robadas por grupos delincuenciales que logran obtener sus datos e información personal y la usan para hacer las respectivas solicitudes mediante llamadas telefónicas o las páginas bancarias.
Eso fue lo que le pasó a una mujer que decidió hablar con Noticias Caracol para relatar lo que le ocurrió, pues delincuentes le robaron la identidad para solicitar préstamos pero, tras varios meses desde que hizo la respectiva denuncia, quien ha tenido que responder por los mismos ha sido ella.
Cuenta de ahorros: así funciona una nueva modalidad de estafa
Todo inició cuando bancos la llamaron a notificarle sobre la extraña apertura de una cuenta de ahorros a su nombre. “Me preguntaron si la había abierto yo y les indiqué que no, pero nunca me indicaron qué se estaba generando sobre esas cuentas, por lo que el proceso quedó así”, recuerda la entrevistada, quien optó por no revelar su identidad por razones de seguridad.




Pese a haber dado el aviso, los delincuentes siguieron con su plan: empezaron a ajustar y hacer cambios en los datos e información del usuario. Pasado un tiempo desde la última llamada, la víctima recibió un mensaje de texto que la obligó a bloquear todas sus cuentas personales pero era demasiado tarde, ya le habían solicitado tres créditos cuya suma de deuda superaba los 20 millones de pesos.
“Ellos me alertaron de cambios de información en mi usuario. Yo alcancé a generar los bloqueos respectivos. Todo ese dinero asciende, mas o menos, a 23 millones de pesos con los intereses”, explica la afectada.
La víctima inició los respectivos trámites con las entidades para poder saldar la deuda, pues le estaban cobrando por solicitudes que ella nunca había hecho. Hasta el día de hoy, la entrevistada asegura que los bancos no le han brindado solución a sus casos, y contrario a ello le dijeron que todo lo ocurrido había sido culpa de ella.
Conforme avanzó el proceso, la mujer descubrió que los primeros movimientos que hicieron los delincuentes acontecieron solo ocho días después de que ella hubiera solicitado una tarjeta de crédito ante una entidad bancaria. Según ella, fue en ese momento en que robaron su información personal para hacer el respectivo fraude. “Tomaron, como tal, la copia de la cédula. Con eso ya quedaba aprobada la tarjeta y a raíz de ahí, a los 8 días, por las fechas en las que se evidencian los primeros movimientos, empezaron como tal las diferentes transacciones en las entidades financieras”, agrega.
En el marco de la lucha contra estas modalidades de robo, las autoridades dieron a conocer un reciente operativo con el que lograron capturar a alias Fabián, un hombre que, junto a su banda de otros tres delincuentes, se desempeñaba ejecutando este tipo de robos cibernéticos. Se trataría, según el coronel Adrián Vega, jefe del Centro Cibernético de la Policía, de “una organización de cibercrimen conformada por 4 delincuentes cibernéticos que, utilizando bases de datos, lograban perfilar financieramente a sus potenciales víctimas quienes les expedían productos financieros que posteriormente serían utilizados”.
Los delincuentes contaban con su centro de operaciones en Kennedy, y al ser sorprendidos por las autoridades se descubrió que tenían en su posesión más de 73 cédulas robadas o falsificadas con las que llevaban a cabo los respectivos robos.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO