Iván Duque expresó su desacuerdo con los proyectos que impulsa la actual administración en materia laboral, pensional y de salud. A su juicio, “hay poca gestión y solo críticas”.
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Sobre la reforma pensional, el exmandatario señaló que le preocupa que el Gobierno de Gustavo Petro pretenda acabar con la posibilidad que tienen los colombianos para elegir en dónde cotizar su pensión.
“Una de las cosas más importantes que logró Colombia en los años 90 con la Ley 50, con esa transformación del sistema pensional, fue la libertad de elegir. Muchos colombianos hemos podido disfrutar de esa libertad, de saber si ponemos nuestros ahorros de nuestros trabajos en los fondos privados o en Colpensiones; entonces, primero me preocupa que se esté eliminando la capacidad de elegir”, detalló.
Partiendo de esa idea, el expresidente dijo que considera “gravísimo” que los ciudadanos tengan que estar obligados a pasarse a Colpensiones. Incluso, aseguró que tal proyecto puede ser “inconstitucional”.
Iván Duque advierte problema en Colombia por reforma pensional
El exmandatario indicó que los ahorros pensionales no son plata de bolsillo de ningún Gobierno, motivo por el cual cree que Petro no hace bien con los cambios que propone, puesto que los recursos de las AFP pasarían al control del Estado, mediante Colpensiones.
“Con esa plata no se puede ni jugar y mucho menos se puede tratar de convertir lo que es el ahorro acumulado en una transferencia de cajero automático de los fondos privados al Estado colombiano. Eso sería una expropiación”, expresó.
En ese orden de ideas, Duque advirtió que “hay elementos graves que constituyen una especie de corralito pensional”. Es decir, el proyecto significa una restricción a la libre disposición del dinero de las personas.
Un corralito es un conjunto de medidas políticas restrictivas que busca evitar la salida en masa de depósitos bancarios. El término se acuñó en Argentina para denominar a la restricción de la libre disposición de dinero en efectivo de plazos fijos, cuentas corrientes y cajas de ahorros impuesta por el gobierno del entonces presidente Fernando de la Rúa en el mes de diciembre de 2001, explica El Economista.
Finalmente, expresó que aunque la reforma pensional es la que más se ha discutido entre distintos sectores, no considera que sea un proyecto positivo para el país.
“Que se mantenga un sistema pensional donde las inversiones estén absolutamente regladas y acorde con buscar la mejor rentabilidad para el ahorro, y no convertirse en la plata de bolsillo de un Gobierno para hacer inversiones”, concluyó.
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