Las millonarias deudas llevaron a la empresa Coninsa, muy reconocida en Bogotá y otras ciudades por proyectos de construcción y arrendamiento de inmuebles, a solicitar la ayuda de la Superintendencia de Sociedades y evitar la liquidación.
Así lo dejó ver el ente regulador este martes, al informar que admitió al Trámite de Negociación de Emergencia de un Acuerdo de Reorganización a la sociedad mencionada.
“La compañía deberá fijar un aviso sobre el término de duración de la negociación, comunicar a los acreedores el inicio de la negociación de emergencia y a todos los jueces y entidades que adelanten procesos ejecutivos, de restitución, de ejecución de garantías o de cobro coactivo”, informó la Supersociedades.
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Según el ente regulador, Coninsa debe dar el aviso con el fin de que sus acreedores suspendan durante el trámite los procesos de cobro. Así mismo, deberá iniciar la negociación con sus acreedores y celebrar el acuerdo de reorganización en un término no mayor a tres meses para la confirmación por parte del Juez del Concurso.
Para quienes no conocen esta compañía, se trata de un negocio creado en 1990, con sede en Medellín, pero presencia en diferentes ciudades. Según dice su actividad, a través de sus negocios pretende dar soluciones y responder eficazmente a sus clientes.
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Entre los servicios que ofrece esa constructora se destacan avalúos, consultoría inmobiliaria, corretaje institucional, arrendamientos de inmuebles, avalúos, compra de lotos en Bogotá y la Sabana, entre otros.
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