Cabal, que le mandó varios sablazos a Gustavo Petro, dijo que teniendo una inflación poco más arriba del 11 %, además de “unos puntos por productividad” se podría estar viendo una propuesta del orden del 13 % del lado de los empresarios, superior al 10 % que hubo para 2022.
“El salario mínimo debe reconocer el aumento de la inflación y el dato de productividad”, consideró.
“El salario mínimo debe reconocer el aumento de la inflación y el dato de productividad que entrega @DANE_Colombia. Debe ser un salario racional de acuerdo con el momento coyuntural que estamos viviendo” @JaimeA_Cabal #Nexos2022
— Fenalco Nacional (@FenalcoNacional) October 14, 2022
A su turno, el viceministro de Trabajo de Colombia, Edwin Palma, se refirió a que el aumento del salario mínimo ya se discute dentro del Gobierno, pero no hay todavía una cifra concreta.
“Estamos mirando y la construcción del aumento del salario mínimo es una discusión técnica en la que hay que escuchar a los afectados”, agregó Palma.
Adicionalmente, indicó que se plantea la obligación de desarrollar un compromiso constitucional sobre el estatuto del trabajo, en el marco de la reforma laboral, un plan que ha estado quieto por 30 años.
Al tiempo que se busca también derogar la reforma laboral de 2002, pues estuvo condicionada a que se cumpliera con puestos de trabajo que no se alcanzaron.
De cara a los principales pilares que se están viendo para la nueva reforma laboral, Palma añadió que iniciativas como la reducción de la jornada laboral y el mejor pago de festivos y dominicales lo que buscan es mejorar las condiciones laborales en el país.
“Llevar ingresos laborales a los trabajadores se traduce en generar más consumo y motivar el comportamiento económico de Colombia”, agregó Palma.
La visión desde el Gobierno sigue centrada en que la reforma laboral en el país va a ser discutida y consultada con trabajadores, pero también con los empresarios.
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