De acuerdo con la Cadena Ser, el club Zibo Cuju FC está de último en la tabla de su grupo, con solo un punto de 15 posibles, y las decisiones y caprichos de su dueño, el magnate He Shihua, no los deja salir de la crisis.

Hace semanas Shihua se hizo famoso en el mundo del deporte, pues se viralizó la noticia de un dueño de un equipo en China que ingresó a un partido oficial, contra el Sichuan Jiuniu, con la camiseta número 10 en la espalda. Como era de esperarse, no tiene el entrenamiento ni el nivel para jugar fútbol profesional.

He Shihua, de tan solo 35 años, compró el equipo y lo salvó de la bancarrota; pero puso algunas condiciones a los antiguos directivos para convertirse en el nuevo propietario, explica la cadena española.

Uno de las exigencias es que él y su hijo, que tienen sobrepeso, con 126 kilos, fueran inscritos como jugadores. Aprovechando su poder, recientemente obligó al entrenador del equipo a ingresar a su hijo en otro partido.

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El video de esta curiosa situación se ha compartido profusamente en redes sociales. En las imágenes se ve que el juego en cuestión va empatado a uno en el minuto 75 de juego e ingresa el número 7, el joven hijo de He Shihua que pesa 126 kilos.

Medios locales, citados por la Cadena Ser, informan que el multimillonario suele participar en los entrenamientos del equipo y tiene una buena relación con los futbolistas, con los que come y bromea luego de las prácticas.

Hijo con sobrepeso de dueño de equipo en China entra a jugar partido

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