Nurmagomedov, de 30 años, mantuvo su invicto luego de mostrarse muy superior a McGregor desde el principio, presionándolo en todo momento, superándolo desde el suelo y acabando con él con un mataleón, una sumisión común en las artes marciales mixtas (MMA).

Tras la pelea, Nurmagomedov se enfrentó al rincón de su oponente, lo que dio paso a una pelea multitudinaria en la que incluso un miembro del público subió al cuadrilátero y la policía tuvo que actuar.

McGregor abandonó el ring el T-Mobile Arena abucheado, su rival fue despedido con lanzamiento de objetos por parte de los aficionados y la organización informó que, debido a los problemas finales, no habría entrega del cinturón.

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“¿Cuáles son las palabras que se supone que uno use para describir lo que aconteció? Ese es literalmente mi trabajo. Y no encuentro ninguna”, escribió un reportero del portal 12UP presente en el coliseo.

“Una escena vergonzosa, pero hay una razón por la que se les llama deportes de lucha, amigos”, concluyó.

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