A mediados de 1996, la Organización Ardila Lulle adquirió a Atlético Nacional, convirtiéndose en la primera empresa privada del país con un equipo de fútbol profesional.

Desde su llegada, el cuadro verde contó con un gran capital económico que le permitió seguir y consolidarse como el club más importante de Colombia.

Así pues, desde ese gran negocio hecho hace 26 años, Nacional ha conseguido 22 títulos de los 31 que posee en su haber. 11 ligas, 5 copas nacionales, 2 super ligas, 1 Recopa Sudamericana y 1 Copa Libertadores se encuentran en el palmarés del ‘verde’ bajo el yugo de la Organización Ardila Lülle.

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Sin embargo, y sobre todo en los últimos años, los directivos de Atlético Nacional han cometido algunos errores que manchan un poco el éxito deportivo. Situaciones de forma y fondo, que han roto relaciones con algunos jugadores y aficionados del ‘rey de copas’ colombiano.

Y es que desde la llegada de Carolina Ardila, hija del dueño del club, a finales de 2016, el rumbo de la institución ha sido cuestionado por algunas decisiones corporativas que terminan afectando el ambiente deportivo y la ‘pasión’ que genera el verdolaga.

2017: Reinaldo Rueda, Andrés Botero y una debacle deportiva

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En 2017, Nacional cambió de presidente. El cargo fue dejado por Juan Carlos De La Cuesta, con una gestión deportiva exitosa, y en su reemplazo llegó Andrés Botero Phillipsbourne. El exdirector de Coldeportes, quien terminó imputado por responsabilidad fiscal por el desfalco de los Juegos Nacionales 2015; llegó en marzo, cuando el club vivía horas duras en Copa Libertadores donde estaba defendiendo el título.

Pese a que ese semestre Nacional logró la Recopa Sudamericana y la Liga colombiana, con Botero al mando se dio la polémica salida de Reinaldo Rueda, sin explicación alguna y con muchos chismes de pasillo. Además, el dirigente demostró nulo conocimiento del mundo del fútbol y por eso cada declaración a medios era un tiro en el pie para Nacional; desconocimiento que quedó retratado también en cada ventaja de fichajes.

2018: Gio, Mac y Dayro

  • Con el fracaso inmediato del año anterior, el 2018 inició con más polémica. El 2017 había cerrado con el anuncio de Giovanni Moreno como nuevo jugador del club; fichaje que se cayó prontamente pues nunca hubo nada más allá de una reunión entre el futbolista y el técnico entrante Jorge Almirón. Sin embargo, durante aquella conversación, el presidente Botero ordenó anunciar públicamente al volante como refuerzo, y todo terminó mal.
  • Días después, y durante plena pretemporada en Estados Unidos, un directivo del club le ‘sugirió’ a Macnelly Torres que buscara un equipo nuevo. Así, sin explicación alguna, un alto mando le avisaba al volante más exitoso de la historia de Atlético Nacional que debía salir. Sin previo aviso ni conversación, Torres quedó sorprendido. Las críticas claramente no se hicieron esperar y el escándalo mediático obligó a cambiar las cosas, asegurando la continuidad del ‘Mago’, aunque el daño ya estaba hecho y terminó saliendo 6 meses después.

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  • Pasaron los meses y con las finales perdidas ante Millonarios y Tolima, otro escándalo dijo presente. Esta vez fue con otro referente del plantel. En el segundo semestre, Nacional estaba a punto de quedar eliminado y Dayro Moreno tuvo una pelea dentro de la cancha con su compañero Jhon Lucumí. Los dirigentes le apostaron al segundo, de quien tenían la ficha, y expulsaron del equipo al goleador, sin importar rendimiento e historia dentro del club.

2021: el audio de Aldair Quintana

Con Nacional eliminado de la Liga y sumando su cuarto año sin lograr el título, los ánimos que ya estaban caldeados terminaron de incendiarse con una filtración.

Un audio de Aldair Quintana se hizo público, donde el portero la cogía en contra de la hinchada de Nacional con palabras fuertes y sin filtro. Esto ocasionó una reacción negativa de los aficionados, que exigieron la salida del futbolista. Sin embargo, la directiva del cuadro verde salió a respaldar a capa y espada a su jugador, pidiendo respeto hacia la persona y buscando una reconciliación. Una medida que, para muchos, ninguneaba al hincha.

2022: otra vez Gio Moreno

En plena celebración de un título que le costó sudor y sangre a Nacional, Gio Moreno dio una rueda de prensa donde se mencionaron las condiciones laborales del ‘Arriero’ Herrera. En medio de la euforia, el jugador se ‘atrevió’ a pedir que se le reconociera el campeonato y estas fueran mejoradas. Más allá del escándalo mediático que esto generó, el tema parecía haber quedado ahí y en el verde seguían festejando la estrella 17.

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Pero, días después, al futbolista le notificaron que no continuaba en el club. ¿La razón? A los directivos les molestaron sus palabras en la final por razones institucionales, y tenía que ser expulsado.

A diferencia del caso Aldair, acá los dueños del club fueron tajantes pero para crucificar al jugador. Así, Gio, uno de los capitanes del plantel, terminó por fuera en una de las polémicas más fuertes que se conozca en los últimos tiempos.

Estos son algunos casos donde la razón corporativa ha primado más que otra cosa, y que, para muchos hinchas de Atlético Nacional, son errores imperdonables de sus directivos. Fallas que afectan en lo deportivo y sentimental, y que demuestran, quizás, una desconexión entre los ‘dueños del negocio’ con el universo verdolaga.