La victoria (0-2) de Atlético Nacional en su visita al Alianza Petrolera, por la sexta fecha de la Liga BetPlay 2 2022, se vio -si se quiere- empañada por un hecho que generó controversia en las redes sociales, y sobre el cual su protagonista, el arquero Aldaír Quintana, aún no se ha pronunciado en sus perfiles.

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Las cámaras del canal oficial del FPC captaron al guardameta tolimense al servicio del ‘Rey de Copas’ haciéndose el ‘manicure’ en pleno compromiso, aprovechando su presencia en el banco de suplentes. El gesto no cayó bien entre la afición del equipo, que pidió explicaciones de este insólito comportamiento.

“Se está haciendo las uñas Quintana, mire usted”, dijo entre risas el relator del juego, Eduardo Luis López, en lo que para el narrador fue un jocoso momento, pero que para algunos seguidores del club fue objeto de todo tipo de comentarios, incluso señalando al profesional de falta de compromiso.

La escena generó tanta controversia que el espacio ‘Debate F’ de ESPN, conducido por el periodista argentino Martín Liberman, se refirió al suceso y lo tuvo en consideración con un invitado de la cadena: el exfutbolista Fabián Vargas, quien desde Colombia salió en defensa del futbolista de 28 años.

“Averigüé qué había sucedido. Me dijeron que tenía un ‘padrastro’, que se le levantó un cuero de la uña y es fastidioso. Mientras estaba en el banco que le pidió al utilero que le prestara un cortauñas. Se lo quitó, en ese momento lo agarró la cámara y se generó la polémica”, dijo Vargas.

“Tenía que estar bien, porque le toca entrar a uno con un ‘uñero’ pues lo mejor era que se arreglara en ese momento”, recalcó Vargas, ante el respaldo de un exportero de la categoría de Carlos Navarro Montoya, panelista de este espacio, junto a otros exfutbolistas argentinos.

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No es el primer suceso en el que Quintana queda expuesto ante la hinchada. Desde el polémico audio en el que se refirió en malos términos de la afición y el club, el cancerbero quedó sentenciado y pese al título de mitad de año, que parecía calmar las aguas, los ataques hacia el jugador continuaron.

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