¿Ha notado que lo que es culturalmente percibido como femenino se considera inferior? El rosado, las películas románticas, la moda y el maquillaje son algunos de los ejemplos de cosas que tienen una connotación negativa en ciertos escenarios, por asociarse a la mujer.

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Si ha pensado que la relación con los hombres es más sencilla o que decirle a una mujer que “no es como las otras” es un cumplido, es posible que hayan caído en este comportamiento. Incluso, si consideran que las industrias como la moda o la belleza son frívolas y carecen de valor intelectual, pueden ser señales de misoginia interiorizada.

Diferentes estudios han demostrado que este fenómeno no solo afecta la manera en la que es percibida la feminidad y la relación entre mujeres, sino también su salud mental.

El fenómeno que define a todas esas preconcepciones es denominado misoginia interiorizada y, de acuerdo con el artículo, ‘Exploring Sexual Minority Women’s Experiences of External and Internalized Heterosexism and Sexism and their Links to Coping and Distress’, publicado en la revista ‘Sex Roles Journal’, se define como “la interiorización de actitudes negativas sobre las mujeres que se manifiestan con su desvalorización, la desconfianza hacia ellas y el sesgo de género a favor de los hombres”.

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