Cuando un gato huele algo y abre la boca, está haciendo una acción involuntaria conocida como la reflejo de Flehmen, que consiste en elevar el labio superior y abrir la boca mientras inhala profundamente. Este comportamiento es una forma de intensificar la percepción de ciertos olores, especialmente aquellos que son demasiado sutiles o complejos para ser detectados solo por el sentido del olfato.
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El gato posee una órgano vomeronasal, también conocido como el órgano de Jacobson, que se encuentra en el techo de su boca. Es el responsable de captar olores que no necesariamente son percibidos por la nariz, como los feromonas y otros compuestos químicos que influyen en el comportamiento social y reproductivo de los animales.
Al abrir la boca, el gato permite que el aire entre en contacto directo con este órgano y, así, procesar mejor ciertos olores y tomar decisiones que son vitales para su supervivencia.
¿Es normal que mi gato abra la boca después de oler algo?
El reflejo de Flehmen es completamente normal y saludable en los gatos. Es una reacción instintiva que les ayuda a procesar y entender el entorno que los rodea, especialmente en relación con otros animales. Aunque este comportamiento no siempre es visible, muchos gatos lo hacen de forma más frecuente de lo que parece, especialmente cuando están en un espacio nuevo o interactúan con otros gatos.
Además, los gatos también pueden utilizar esta respuesta cuando se sienten intrigados o atraídos por un olor fuerte, ya sea un posible compañero, un competidor o una presa. En estos casos, el reflejo de Flehmen ayuda a interpretar mejor el “mensaje” químico de los olores.
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