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En la alimentación de nuestras mascotas es esencial ser consciente de qué alimentos son seguros y cuáles deben evitarse. Algunas frutas resultan ser tóxicas o peligrosas para los perros. Mantenerse informado y ser responsable con lo que se comparte con ellos es esencial para su bienestar.
Una de las frutas que están rotundamente prohibidas para los caninos son las uvas. Tanto las uvas como las pasas pueden ser muy tóxicas para ellos, por razones que no están completamente claras, ya que aún no se conoce la sustancia exacta que los afecta.
Sin embargo, se ha observado que incluso pequeñas cantidades de uvas o pasas pueden causar problemas graves en algunos perros. Los síntomas de envenenamiento por uvas o pasas pueden incluir vómito, diarrea, pérdida de apetito, dolor abdominal e incluso insuficiencia renal.
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Dado que no se sabe exactamente qué componentes de las uvas y las pasas son responsables de esta toxicidad, es mejor prevenir y evitar darles estas frutas a los perros por completo. En su lugar, se recomienda optar por otras frutas seguras y alimentos diseñados específicamente para perros, ya que la seguridad de su mascota es lo más importante. Si su perro consume uvas o pasas por accidente, se debe buscar atención veterinaria de inmediato.
¿Qué frutas no pueden comer los perros?
Además de las uvas y las pasas, existen otras frutas que no se recomiendan dar a los perros, ya sea en grandes cantidades o en absoluto, debido a varios motivos, como posibles riesgos para la salud o dificultades digestivas. Algunas de estas frutas incluyen:
- Aguacate: contiene una sustancia llamada persina, que puede ser tóxica para los perros. Causa problemas gastrointestinales y, en casos graves, dificultades respiratorias.
- Cerezas: el peligro de esta fruta es el hueso, ya que contiene cianuro, que es tóxico para los perros. Consumirlo es peligroso. Además, las cerezas causan problemas estomacales debido a su contenido de azúcar.
- Cítricos: las frutas como las naranjas, limones, limas y toronjas generan malestar estomacal debido a su acidez. Además, los frutos cítricos tienen una alta cantidad de azúcares, lo que puede generarles problemas de obesidad y diabetes.
- Frutas con hueso grande: alimentos como los duraznos y ciruelas contienen grandes huesos que los perros no deben consumir. Estos huesos son peligrosos ya que astillan y causan obstrucciones o daños en el tracto digestivo.
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En general, si desea darle frutas a su perro como premio ocasional o complemento de su dieta, asegúrese de hacerlo en cantidades moderadas y siempre retirar las partes potencialmente peligrosas como las semillas, los núcleos o las cáscaras.
*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de Robby Mascotas, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto.
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