La microbiota intestinal es el conjunto de microorganismos que habitan en el intestino, y está formada por bacterias, hongos y protozoarios. La microbiota juega un papel importante en la digestión de los alimentos, la absorción de nutrientes, la protección contra enfermedades y el equilibrio del sistema inmunológico.

La microbiota intestinal se ve afectada por diversos factores, como el estrés, el consumo de antibióticos o cambios en la dieta. Los alimentos que ingerimos influyen directamente en la composición y funcionamiento de la microbiota intestinal. Por esta razón, es importante cuidarla mediante una dieta balanceada y saludable.

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Los alimentos que benefician a la microbiota intestinal son aquellos ricos en fibra soluble e insoluble, ya que ayudan a regular el tránsito intestinal y promueven la eliminación de residuos. Los probióticos también son beneficiosos para la flora intestinal, ya que ayudan a repoblar las bacterias buenas después de haber sido eliminadas por antibióticos o diarrea. Algunas verduras y frutas son buenas fuentes de probióticos naturales: kéfir, yogur natural, chucrut (repollo fermentado), kimchi (col fermentada), natto (soya fermentada) y tempeh (soya fermentada).

Por otro lado, existen alimentos que dañan o alteran la microbiota intestinal. Estos están compuestos por azúcares simples o refinados (glucosa, fructosa), carnes procesadas y grasas saturadas. El consumo excesivo de estos alimentos traen inflamación crónica e incrementa el riesgo para obesidad métrica abdominal tipo androide, diabetes mellitus tipo dos e hipertensión arterial.

Los antibióticos son uno de los principales responsables de la alteración de la microbiota intestinal. Estos fármacos no solo matan a las bacterias enfermas, sino también a las buenas. Por esta razón, es importante tomar probióticos después de haber tomado antibióticos para reponer las bacterias beneficiosas que han sido eliminadas.

Pautas para tomar un probiótico según especialistas incluyen: 

  • Tomar el probiótico por la mañana o media hora antes de acostarse.
  •  No tomarlo con comidas pesadas o grasientas ya que puede reducir su efectividad. 
  • No exceder la dosis recomendada por el médico o fabricante del producto. 
  • Almacenar el producto en un lugar fresco y seco, lejos del calor y la luz directa del sol.

Ten en cuenta que es necesario antes de decidir tomar un complemento o suplemento alimenticio consultar con un profesional especializado.

*Este artículo fue redactado por Robby Bienestar, una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano.