Con la llegada de la Navidad, la gastronomía colombiana se vuelve aún más protagonista de estas celebraciones en las mesas de las familias. Pese a ello, con el paso del tiempo las innovaciones cada vez son más, por lo que aprender a maridar platos colombianos con un buen vino o trago es muy importante.

(Vea también: Subió el consumo de vino en Colombia durante confinamiento; en estas ciudades lo prefieren)

José Rafael Arango, sommelier colombiano, le dijo a la revista Buen Gusto que el maridaje, es decir, la mezcla de un trago con un plato, se debe hacer partiendo de una similitud o un contraste. El primero trata de mezclar comidas parecidas con el sabor del vino, como carnes muy grasosas con vinos tintos que tengan cuerpo. El segundo busca sabores opuestos, como un vino dulce con un queso de sabor fuerte.

Los colombianos hemos sido temerosos de combinar platos como ajiaco o lechona con vino. Es momento de arriesgarse y probar el maridaje de vino con toda nuestra gastronomía criolla”, dijo Arango a ese portal.

¿Qué vinos combinan perfecto con platos típicos colombianos?

  • Lechona: un buen vino para combinar con este plato, de acuerdo con el portal buengusto.co, puede ser un Tempranillo, un Ribera del Duero, dos vinos tintos que van muy bien con comidas altas en grasa.
  • Tamal: El chef aseguró al mismo medio que con todos los tamales que existen por departamento se puede usar un Chardonnay, un vino blanco a base de uva verde.
  • Postres colombianos: los dulces populares de la gastronomía nacional pueden ir acompañados de vinos late harvest, que son dulces, o también con vinos espumosos, dijo la revista.
  • Bandeja paisa: para ese plato, originario de Antioquia, un vino tinto Shiraz puede ser una excelente opción, pues ese plato tiene una buena cantidad de grasa y el vino tiene bastante cuerpo.
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¿Cuánto vino se consume en Colombia?

Chile es uno de los mayores productores de vino en Latinoamérica, y Colombia es su mayor consumidor. Según ProChile, Bogotá concentra 80 % del consumo de vino en todo el país, el 20 % restante está entre Medellín, Cali, Barranquilla, Cartagena y Bucaramanga.

Los colombianos prefieren en un 61 % los vinos tintos, seguidos de los vinos blancos con 35 % y los vinos rosados con 8 %.