Siempre que se inicia alguna rutina de ejercicio o de dieta, se suelen escuchar diferentes recomendaciones sobre la cantidad de comida y los horarios que se deben implementar para lograr el objetivo de adelgazar. Uno de los que más se ha difundido es el de no consumir alimentos en la noche, pero qué tan cierto según los expertos.
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Frente a esto, un grupo de científicos estadounidenses hizo un experimento que contó con la participación de 16 personas y dos planes alimenticios. El primer grupo comió temprano, es decir al menos 6 horas antes de dormir y, el segundo grupo, cenó con solo 2 horas de anticipación.
Luego de que todos las personas consumieron la misma cantidad de nutrientes e hicieron la misma actividad física, el estudio que fue publicado en la revista Cell Metabolism determinó que comer muy tarde y con pocas horas antes de dormir sí afecta el peso de una persona y existe un mayor riesgo de engordar.
Los expertos explicaron que comer tarde provoca que el apetito aumente, las calorías quemadas disminuyan y, por lo tanto, el metabolismo de los lípidos se ralentice. Es decir que son 3 factores que se ven afectados y conllevan a un aumento de peso si la persona come solo 2 horas antes de acostarse. Estos son:
- Control de apetito.
- Gasto energético (calorías quemadas).
- Metabolismo del tejido graso.
Qué pasa cuando se come de noche
Ahora, según el portal Salud 180, comer durante la noche puede ocasionar otros problemas en la salud como:
- Acidez estomacal: los contenidos que se encuentran en el estómago pueden retroceder hasta el esófago e irritarlo, causar acidez gástrica, náuseas e indigestión.
- Afectación en el ciclo metabólico: además del aumento de peso, pueden aparecer enfermedades como diabetes tipo 2, problemas gastrointestinales y depresión.
- Ganas de ir al baño: como los alimentos se digieren durante el sueño, va a aumentar la necesidad de micción y excreción.
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