El pequeño se encontraba en el lugar, junto a su familia, por la celebración del sexagésimo aniversario del museo, cuando se le ocurrió la idea de soplar el pebetero que está ubicado en el salón donde se encuentran las cabezas de los héroes de la independencia, asegura SDP Noticias.

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Minutos después, llegaron miembros de la policía municipal para impedir que se acercaran una vez más al monumento, que ya estaba apagado, aunque estas medidas no sirvieron de nada porque el niño aún corría por todos lados, informa la TV de Guanajuato.

El fuego representa el acto heroico de los próceres durante la independencia en la Alhóndiga de Granaditas donde se logró el primer triunfo del ejército insurgente el 8 de septiembre de 1810, indica el medio. Tocará esperar a septiembre de este año para poder renovar la llama.