El hecho ocurrió en el zoológico de Rosy Walther, en Honduras, y sucedió cuando el visitante ebrio intentó varias veces consecutivas tocar al animal, señaló Minuto30.com. 

Aunque inicialmente el felino se encontraba en una roca a unos pocos metros del visitante, los insistentes llamados provocaron que este saltara de su lugar hacia donde se encontraba el hombre.

Tigresa del Oriente.

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En ese momento, “el borracho rápidamente retiró su brazo, pero decidió acercarse nuevamente para acariciarlo en la espalda mientras sus amigos se reían”, aclaró el portal.

Al tocarle la parte de atrás de su cuerpo, el animal dio una vuelta y tomó fuertemente el brazo del individuo. Testigos cercanos a los hechos contaron que, hasta ese momento, no se vio un inminente peligro. Sin embargo, luego de unos minutos, se alertaron por la situación, pues al no lograrse libertar del animal se llegó a pensar que estuvo a punto de perder su extremidad.

Ante esta situación el portal Aweita de Perú informó que, según los informes policiales, “el hombre “ebrio” había entrado en el zoológico con un grupo de amigos y se acercó a la jaula sin que los cuidadores lo notaran”.

Aquí, el video completo de la situación:

Imágenes fuertes (recomendamos discreción)