Achim Wiese portavoz de la DLRG, aseguró a The Guardian, que los casos de niños ahogados en piscinas, ríos, embalses o playas se deben a la excesiva atención que los padres prestan a sus dispositivos móviles.

“Hay demasiados padres que no se están tomando en serio la advertencia. Cuando sus hijos o nietos estén en el agua, deje el celular a un lado” señaló Wiese al medio citado.

Del mismo modo, Peter Harzheim, miembro de la Federación de Supervisores de piscinas expresó que “Cada día observamos el mismo comportamiento; la gente piensa que la piscina es como una guardería y no presta atención”.

En el pasado, tanto padres como abuelos dedicaban más tiempo con sus hijos en la piscina, pero esa tradición se viene perdiendo por estar esclavos de sus teléfonos. Es muy triste que los padres se comporten de manera tan negligente, agregó el funcionario de la Federación.

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Ante estos casos, La DLRG y otras asociaciones piden que la natación sea obligatoria en el sistema de enseñanza, debido a que la gente no tiene la formación adecuada y por eso no sabe cómo comportarse en el agua si tienen algún problema.