Una conversación filtrada en Twitter desató fuertes críticas contra la aerolínea Viva Air, pues allí se expuso un caso de emergencia aérea en la que supuestamente hubo irregularidades de parte de la empresa que operó el vuelo que cubría la ruta Cali-Riohacha.

En el audio se aseguró que el avión tuvo que desviarse por afectaciones meteorológicas, haciendo maniobras peligrosas que pusieron en riesgo a los pasajeros, ya que según el presunto piloto que habla en dicha grabación no se contaba con el combustible suficiente para cambiar los planes del vuelo. 

“Yo con lo mínimo que he aterrizado son 2.000 o 1.800 kilógramos, estos manes aterrizaron con 200 kg, no se mataron porque no era el día, va a haber escándalo porque a todos esos pilotos los botan y los despachadores también, hoy casi hay una tragedia aérea”, dice un fragmento del audio que incluso señaló que la aeronave apagó sus motores durante el vuelo.

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Al respecto, muchas versiones surgieron sobre lo ocurrido; sin embargo, Viva Air emitió un comunicado en sus redes sociales y explicó qué fue lo que pasó con el vuelo que finalmente aterrizó en Montería, después de que le tocó hacer varias maniobras riesgosas pasando por el aeropuerto de Riohacha y el de Rionegro.

“Es importante aclarar que Viva siempre vuela cumpliendo todos los requisitos establecidos por el Reglamento Aeronáutico de Colombia con respecto a temas como la cantidad de combustible requerido para la planeación del mismo. En ese sentido, cada vuelo tiene una preparación especial y siempre lleva combustible para ir al aeropuerto de destino, combustible adicional para proceder a un aeropuerto alterno en caso de que el de destino se encuentre cerrado y sostenimiento dependiendo las condiciones meteorológicas que se tengan para el vuelo”, explicó inicialmente.

Y añadió puntualizando en el caso del avión que cubría la ruta Cali-Riohacha: “Previendo eso, si bien el vuelo tenía una duración prevista de 80 minutos, el avión contaba con combustible para más de 180 minutos de trayecto, es decir, más del doble del tiempo planeado para cumplir con el itinerario”.

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Además, desmintió tajantemente que los pilotos de la aeronave hayan puesto en riesgo a los pasajeros durante el vuelo: “Asimismo, se ha sugerido erróneamente que durante el vuelo se apagaron los motores de la aeronave para ahorrar combustible. La compañía es enfática en aclarar que ese procedimiento no se efectuó. La compañía tiene a la seguridad como su principal eje de actuación”.

Finalmente, la aerolínea detalló cuál fue el protocolo que se cumplió en este caso para darle solución a los retrasos que le ocasionaron a sus usarios: “Para trasladar a los pasajeros a su destino original, Riohacha, se programó un vuelo posterior que los llevo a su destino sin novedades. Desde Viva la seguridad de los pasajeros es lo más importante, y por eso cumple con estrictos protocolos en cada una de sus operaciones”. 

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