Ese terminó siendo el tema de la discusión en el Senado pese a que la citación se había hecho sobre transporte aéreo y control a las aerolíneas y los tiquetes aéreos.

Allí también estaba citada la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, que volteó el tema hacia la conciliación con los banqueros por la que ha sido muy criticada.

Los senadores al principio estuvieron en desacuerdo pero no tuvieron problemas para exponer sus argumentos sobre Odebrecht.

Las intervenciones de los congresistas salpicaron a la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, pues allí se aseguró que las reuniones se hicieron en su despacho pese a que ella no podía estar presente por haber sido parte de la junta del Banco de Bogotá, del Grupo Aval, también vinculado al escándalo.

Orozco aceptó que se llevó a cabo dicha reunión en la Vicepresidencia por solicitud de los siete bancos.

Ángela María Orozco y Marta Lucía Ramírez

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Por eso la oposición empezó a pedir que el tema no se quede ahí y que Ramírez asista al debate de control político que se hará sobre este tema el próximo 27 de agosto y responda por estos señalamientos.

El senador del Polo Democrático Jorge Robledo consideró, citado por RCN Radio, que “está más encartada la doctora Ramírez que la doctora Orozco”.

El congresista añadió:

“Es obvio que la vicepresidenta tiene una amistad entrañable, cercanísima, de negocios y actividades asociales de todo tipo con el doctor Luis Carlos Sarmiento Angulo, entonces ella tiene un impedimento que no es de 12 meses, sino permanente y ella está manejando desde la Vicepresidencia todos los negocios de Luis Carlos Sarmiento de infraestructura”.

Antonio Sanguino, de Alianza Verde, se unió a la petición y recalcó que “la señora vicepresidenta no puede convertir su cargo en un instrumento para complementar sus acciones empresariales privadas del pasado y mucho menos el ministro de Hacienda y tampoco la ministra de Transporte”.