Su historia no es nueva, pero siempre es cautivante. Al principio la tomaron por bruja y chamán, pero desde que Dios le reveló sus misterios, ella ha servido como un motivo de fe y de cambio, comentó para El Espectador.

Yo soy un instrumento de Dios y simplemente dejo que Él me use como quiera”, afirmó Merino al periodista Luis Guillermo Montenegro, que indagó sobre cómo esta mujer, que se describe a sí misma como una sencilla ama de casa, logra influir en las creencias de decenas de futbolistas.

Me siento como la madre de ellos, como una familiar más” admite Merino que entre sus guiados se encuentra el volante colombiano Daniel Torres, jugador del Deportivo Alavés de España.

A Merino se le atribuye que Torres hiciera pública su oposición al ‘No’ en el plebiscito por la paz porque, según él, los acuerdos del Gobierno y las Farc no tuvieron a Cristo como el centro de la negociación.

En una entrevista concedida a La W Sandra Merino afirmó que Dios “aborrecía” lo que se estaba haciendo en Cartagena (la firma de los acuerdos) por enviar un mensaje errado.

Para ella, lo mejor hubiera sido llamar a un mediador cristiano a La Habana: “hay personas sabias, entendidas, que pueden comprender estos casos espirituales…”, aseguró a la emisora.

La gloria del fútbol, es también la gloria de Dios

Aunque para ella el fútbol no representaba nada importante, su interés empezó a crecer cuando su hija, Ángela María Bolívar, empezó una relación con el arquero de Independiente Santa Fe, Camilo Vargas.

Sus oraciones y sus preocupaciones acompañaron a Vargas no solo hasta su debut en primera división, sino hasta la Selección Colombia en donde el bogotano llegó a ser el suplente de David Ospina.

Pese a que varios acercamientos con la plantilla profesional del cuadro cardenal resultaron infructuosos, finalmente su palabra llegó al camerino en una de las peores crisis del equipo cardenal.

El Espíritu Santo me dijo que Santa Fe estaba atado por prácticas de santería, de ocultismo para la suerte. Que se habían abierto puertas a la brujería y cosas malas y debía comentarles para que le dieran a Jesús el primer lugar y así vinieran cosas mejores. Santa Fe era el único equipo en el mundo con un nombre profético: la Santa Fe, que es la fe santa, es el único equipo que tiene al león de Judá como mascota, el color rojo de su camiseta es el rojo de la sangre de Cristo, luchaba por la séptima estrella, el séptimo título de Liga, el número perfecto de Dios”, comentó al diario.

 

Ha tenido problemas con el presidente de Santa Fe, César Pastrana, pero eso no impidió que su trabajo espiritual se apartara de los jugadores.  Diego Cocca, técnico de Millonarios, también le prohibió ir a los entrenamientos.

No obstante, y para disipar las dudas, su trabajo espiritual no tiene connotaciones económicas como piensan muchos. Según ella, lo hace para “servirle a Dios, mas no pensando en los beneficios económicos que esto me pueda traer”.

Con Torres en España, Merino no descarta que su trabajo espiritual llegue también hasta el Real Madrid y el Barcelona, concluye la crónica de El Espectador.