“La reforma tributaria acabará con la industria del carbón”. Con este mensaje, estampado en las camisetas de cientos de manifestantes, se desarrolló en el municipio de Ubaté, protesta en contra de la reforma tributaria del gobierno del presidente Gustavo Petro que contó con cerca de cinco mil personas.

El evento fue convocado por los empresarios del sector tras la aprobación de la reforma tributaria en segundo debate por las plenarias de Senado y Cámara de Representantes.

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Al respecto, la Asociación Colombiana de Minería (ACM), señaló que el sector estaría “entre los más afectados”. Indicaron que la tasa de renta del carbón sería superior al 55 %, si se tiene en cuenta el efecto de la sobretasa en renta y el impacto de la no deducibilidad de las regalías, muy por encima de los países de la OCDE que, en promedio, tienen tarifas de renta de 21% e incluso de Latinoamérica donde el promedio es 26%.

En entrevista con El Heraldo, el presidente de la ACM, Juan Camilo Nariño, mencionó que el proyecto aprobado es inequitativo con el sector y compromete su viabilidad actual y la estabilidad económica y social de más de 900.000 familias que dependen de esta industria en los municipios mineros del país.

“Fue aprobada la no deducibilidad de las regalías y una sobretasa de hasta 10 puntos en renta para el carbón, que el Gobierno ha dicho es aplicable solo para precios altos, pero no es así. La sobretasa se aplicaría en precios normales de acuerdo a su promedio histórico”, precisó.

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El alcalde de Cucunubá, José Benito Martínez, que se hizo partícipe en la marcha, pidió que se modifique la reforma tributaria. “Los impuestos que trae prácticamente acabaría con el sector minero que genera más de 25 mil empleos directos en la provincia de Ubaté. Además, Cucunubá es un municipio 80 por ciento minero y la producción es el sostenimiento de muchas familias”, precisó.

Sobre la misma línea, el alcalde de Sutatausa, Jaime Arévalo, recalcó que la reforma afectaría a su municipio. “Tal vez un 80 por ciento de la economía de Sutatausa depende de la minería. Nosotros tenemos 28 títulos mineros, más de 100 bocaminas, más de 2.000 empleos directos, entonces, como entenderá, esta reforma nos golpea”.

Otros de los que participó en la manifestación fue el alcalde de Guachetá, Jeffer Siatoba, quien fue más allá la indicar que la minería se convertirá en un negocio inviable. “El sentir de nosotros como alcaldes es que este es un sector al que le han vulnerado muchos derechos con esta reforma tributaria que afecta las exportaciones, desincentivan a los inversionistas del mundo en relación con la industria y, por ende, la comercialización de la misma”, detalló.

Agregó que Guachetá mueve 250 mil toneladas de carbón al año, y que, de los 25 mil empleos directos del sector en el Valle de Ubaté, este municipio cubre alrededor de 15 mil. “Cuando se tiene una tributación tan alta, lo que compromete es la estabilidad del sector en el mediano plazo”, culminó Siatoba.

Las opiniones sobre el tema van y vienen. Es el caso de un trabajador que indica que la reforma no acabará con la minería. “Ni van a cerrar las minas, ni nos vamos a quedar sin trabajo; solamente los magnates de la minería están alborotados porque les va a tocar meterse la mano al bolsillo y pagar. La minería no puede parar porque el mundo aún no está preparado para un cambio energético. Pero es el momento de comenzar a cambiar. Antes de pensar en un par de pesos, pensemos en qué le vamos a dejar a nuestros hijos en el mañana”, recalcó.

De acuerdo con la ACM, con esas disposiciones, además del carbón, dentro de la industria minera también se verán en riesgo cerca de 1 millón de empleos.