Como se había anunciado recién el general Eduardo Zapatatiro, comandante del Ejército, se tranzó en una discusión vía Twitter con el candidato presidencial Gustavo Petro, la Procuraduría finalmente le acaba de abrir una investigación al oficial para establecer si incurrió en política.

La serie de trinos los publicó Zapateiro la semana pasada en Twitter. Por esa conducta, el ministerio Público considera que el oficial “presuntamente intervino en actividades o debates de partidos políticos” en la red social.

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El organismo de control recordó que las Fuerzas Militares y la fuerza pública en general no son deliberantes.

La indagación preliminar que abrió este martes la Procuraduría contra Zapateiro se suma a una denuncia que interpuso un ciudadano en la Fiscalía en la que pide una investigación contra el comandante del Ejército por los delitos de intervención en política y prevaricato.

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Puntualmente, Zapateiro habría violado el Artículo 219 de la Constitución, que establece que la fuerza pública no es deliberante y que no podrá reunirse sino por orden de autoridad legítima, ni dirigir peticiones, excepto sobre asuntos que se relacionen con el servicio y la moralidad del respectivo cuerpo y con arreglo a la ley. “Los miembros de la Fuerza Pública no podrán ejercer la función del sufragio mientras permanezcan en servicio activo, ni intervenir en actividades o debates de partidos o movimientos políticos”.

Los trinos de Zapateiro fueron en respuesta a un comentario de Petro sobre el asesinato se seis soldados a manos del Clan del Golfo en Antioquia, según el cual, “Mientras los soldados son asesinados por el Clan del Golfo, algunos de los generales están en la nómina del Clan. La cúpula se corrompe cuando son los politiqueros del narcotráfico los que terminan ascendiendo a los generales”.

Esa afirmación desató la ira del comandante del Ejército que le recordó al candidato de la izquierda el video en el que se ve recibiendo fajos de billetes que estaban en una bolsa de basura, y también lo acusó de hacer politiquería con la muerte de los soldados.

El fuerte intercambio provoco una nueva división del país entre quienes critican al alto oficial y quienes lo respaldan por defender el honor y el buen nombre de los miembros de la fuerza pública. Ahora, será la Procuraduría la que establezca si Zapateiro violó o no la ley.