Al paro de taxistas en Medellín se sumó este miércoles la protesta de más de 800 indígenas pertenecientes a la comunidad embera katío, población mayoritariamente desplazada por la violencia en la región del Alto Andágueda, departamento de Chocó.

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Cuando la movilización de los indígenas llegó a la sede del centro administrativo La Alpujarra, en la calle San Juan, la Policía intentó impedir que los indígenas ingresaran. 

Sin embargo, decenas de ellos lograron ingresar al edificio de la Alcaldía y subieron hasta el tercer piso causando múltiples destrozos.

El personero de la ciudad, William Yeffer Vivas, confirmó que después del ingreso del Esmad de la Policía y una reunión con los líderes de la protesta, se logró un primer acuerdo. 

El compromiso es que representantes de la Alcaldía de Medellín se reunirán en la tarde de este miércoles con los líderes indígenas, las comunidades se podrán quedar en la plazoleta principal de La Alpujarra mientras se lleva a cabo la negociación, y recibirán raciones alimentarias.

¿Por qué protestan los indígenas en Medellín?

La manifestación fue contra la Alcaldía de Medellín y la Unidad Nacional de Víctimas. 

Las comunidades reclaman que los dejen trabajar con presencia de menores, argumentando una supuesta tradición cultural. También piden albergues temporales y reparación como víctimas del conflicto.