Por: Yéssica Salgado

La inseguridad en la capital del Meta ha puesto contra la pared a las autoridades locales y de policía, ya que aunque las cifras muestran una disminución de los delitos de alto impacto durante lo que va corrido del año, el hurto y el atraco son el pan de cada día en las calles de la ciudad.

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Estos actos vandálicos, al parecer, son perpetrados por bandas organizadas, dedicadas a diferentes delitos, que se han conformado en las denominadas ‘ollas’ de la ciudad.

En Villavicencio se han identificado unas diez ‘ollas’ aproximadamente, pero se cree que hay más. Las más grandes se encuentran en los barrios Santa fe, Brisas del Guatiquía, El Porvenir, El Industrial, La Reliquia, Porfía, El Popular, Villa Suárez, San Carlos y San José, entre otros.

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Estos lugares son una especie de ‘guetos’ en donde se expenden drogas y a los que se recomienda no entrar sino se tiene a alguien conocido que le garantice su seguridad, ya que en estas zonas el hurto está a la orden del día; los haladores de vehículos van y vienen, y los asaltantes están a la espera de sus víctimas.

A la sombra de estos grupos de delincuencia trabajan los expendedores de droga, que cada día ganas más terreno en las calles de Villavicencio. Y que se mueven como peces en el agua en diferentes ‘ollas’ de la ciudad, entre ellas la del Santafé, considerada la más grande de Villavicencio, la cual está ubicada al respaldo del cementerio central. 

Allí, de acuerdo con las autoridades operan varias bandas que utilizan la modalidad del raponazo y el atraco con armas blancas y de fuego y, a su vez, llevan a cabo la venta de estupefacientes. 

Su radio de acción se extiende a las avenidas Catama y del Llano, y actúan especialmente en el sector del puente ubicado al lado de la estación de Servicio Villavicencio.

Y aunque las autoridades han desmantelado en lo que va corrido del año  10 estructuras delincuenciales dedicadas al tráfico local de estupefacientes, tras llevar a cabo 118 diligencias de registro y allanamiento, sobre inmuebles en diferentes sectores de la ciudad, que son utilizados para el almacenamiento, distribución y/o consumo de sustancias estupefacientes, las autoridades señalan que: “Está es una problemática delictiva multisectorial, donde medida que pasa el tiempo van formándose nuevas organizaciones o creándose nuevas zonas de expendio”.

En las denominadas ‘ollas’ de la ciudad el alcaloide más traficado es la marihuana, según las autoridades locales. En lo corrido del año, la Policía Metropolitana de Villavicencio incautó 517.782 gramos de marihuana, 38.353 gramos de base de coca, 17.966 gramos de cocaína, 6.437 gramos de bazuco y 1.016 pastillas de droga sintética.

Estas son algunas de las sustancias más buscadas y consumidas por jóvenes de la ciudad en estas zonas de la capital del Meta.

En las denominadas ‘ollas’ de Villavo una dosis de marihuana está avaluada en el mercado ilegal entre 2.500 y 3.500 pesos, el clorhidrato de cocaína es comercializado entre $ 10.000 y $ 15.000 por dosis, y la droga sintética como el 2CB estaría siendo comercializada por los delincuentes entre $ 90.000 y $ 120.000, de acuerdo con información entregada uniformados de la Sijin.

La lucha por el poder de las líneas de microtráfico entre las bandas delincuenciales dedicados a esta problemática delictiva, hacen parte de las principales causas de los hechos de violencia en la capital del departamento del Meta.

Sin embargo, hay que señalar que el delito de homicidio se redujo en un -27 % en toda el área metropolitana, lo que corresponde a 27 casos menos que el año anterior, pero a pesar de estas estadísticas el delito de microtráfico, causante de estos hechos violentos, sigue avanzando en la capital del Meta.

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Ante este panorama tan preocupante, la Policía Metropolitana de Villavicencio señaló que: “La Policía Nacional a través de la Seccional de Investigación Criminal, Inteligencia Policial y el Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes trabajan permanentemente de manera articulada con la Fiscalía General de la Nación y las autoridades político administrativas, con el fin de identificar las zonas de expendio en la ciudad, adelantar los procesos investigativos y poder desmantelar los inmuebles que son utilizados para esta problemática delictiva”.

De acuerdo con las autoridades locales, en lo corrido del año se ha materializado la captura de 463 personas por tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, y se han incautado 581.554 dosis de sustancias estupefacientes.