La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) entregó este viernes el informe sobre la situación de los Derechos Humanos en Colombia en 2022 con preocupantes cifras de violencia.

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De acuerdo con la representante del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Juliette De Rivero, la situación de violencia en el país “está empeorando”. Sentenció la funcionaria.

Durante 2022, Juliette De Rivero, manifestó que la ONU recibió 256 denuncias de homicidio de personas defensoras de Derechos Humanos, de los cuales 116 casos fueron verificados y 140 no fueron concluyentes. En comparación con 2021 fueron verificados 100 casos y en 2020 94 situaciones.

El 45% de los casos verificados de homicidios contra personas defensoras corresponde a integrantes de las Juntas de Acción Comunal.

Frente a las masacres en 2022 se registraron casos de los cuales 92 fueron verificados, 34 no fueron concluyentes y dos casos siguen en proceso de verificación.

En los 92 casos verificados hay 321 víctimas, de los cuales 270 fueron hombres, 30 relacionados con mujeres, 14 situaciones con niños y siete con niñas.

Aquí es preciso resaltar un incremento de las masacres (92) durante 2022, mientras que en 2021 fueron reportados 78 casos y en 2020, 76 situaciones.

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“El informe denota la situación en territorio, la gravedad de las violaciones de derechos humanos que se viven en territorios en Colombia, como el asesinato de defensores, y el Gobierno ha tenido la apertura de aceptar ese diagnóstico”, dijo Juliette De Rivero.

En cuanto a la situación de desplazamiento y confinamiento la ONU reportó que 82.862 personas fueron desplazadas, de los cuales el 19% fueron niños y niñas, mientras que el 65% indígenas y afrodescendientes.

Durante el año anterior, 102.395 personas fueron confinadas debido a los enfrentamientos entre grupos armados ilegales que se enfrentan por ganar territorios para el tráfico de drogas. Del total de confinados, el 70% fueron indígenas y afros.