Alias ‘Miller’, identificado como Aníbal Garavito Hernández, era cabecilla de la estructura Jhon Linares del Bloque Jorge Suárez Briceño, perteneciente a las disidencias de las Farc en el Guaviare.
Fue abatido durante una operación militar conjunta entre las Fuerzas Militares y la Policía Nacional en Puerto Cachicamo, zona rural de San José del Guaviare.
Su muerte ocurre poco después del asesinato de siete soldados, hecho que impulsó una ofensiva del Gobierno contra los grupos armados ilegales en la región.
Las autoridades señalaron que esta acción forma parte de una estrategia para desarticular el mando de las disidencias que operan en el suroriente del país, debilitando así su capacidad operativa.
Según informes de inteligencia, alias ‘Miller’ imponía precios bajos —alrededor de dos millones de pesos— obligando a los cultivadores de hoja de coca a venderle la sustancia bajo amenazas, muy por debajo del promedio del mercado ilegal.
Esta práctica generó inconformidad entre campesinos, quienes denunciaron ante organismos de seguridad las intimidaciones y presiones ejercidas para mantener el monopolio del comercio de droga.
La influencia de alias ‘Miller’ se enmarcaba en la estructura Jhon Linares, vinculada al bloque Jorge Suárez Briceño, grupo armado ilegal con presencia en Caquetá, Guaviare y Meta.
Esta organización mantiene redes de financiación ilícitas, principalmente a través del narcotráfico y la extorsión a comunidades rurales. Dentro de esta estructura, Garavito Hernández era considerado uno de los mandos operativos más visibles, encargado de coordinar actividades criminales y asegurar el flujo de recursos ilegales.
Su control y las tensiones que provocaba afectaban directamente la seguridad y estabilidad de las zonas bajo su dominio, convirtiéndolo en un objetivo prioritario para las autoridades en la lucha contra los grupos armados en el suroriente colombiano.
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