La pandemia obligó a Michelle Polanco a vender aguacates en la calle desde hace unos meses. Ese empleo informal lo vio como un emprendimiento adicional a su trabajo como modelo y en Noticias Caracol dieron a conocer su historia.

Hacía fotos con marcas en las que me iba muy bien, pero muchísimas de esas empresas entraron en crisis y quedamos muchísimas chicas desempleadas. Algunas mamás, otras estudian, ayudan a sus papás. Al igual que yo somos muchas las que queremos generar empleo y crecer con sus emprendimientos”, le contó al noticiero.

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Además de su trabajo como modelo, esta joven caqueteña se desempeñaba como estudiante de derecho y deseaba continuar con sus estudios para poder lograr su sueño de ser abogada.

Para eso montó su puesto en el barrio Prado Veraniego, de Bogotá, y con un cartel escrito a mano invitaba a los transeúntes a que le compraran estos aguacates para salir adelante. “Con su compra me ayuda a pagar mi semestre”, dice el cartel que llamó la atención de muchas personas.

“No hay pena. Hay unas ganas enormes de comerse el mundo y lograr los sueños. Llegó la oportunidad de vender aguacates y pensé que era un buen negocio”, reveló en su historia.

Pues luego de conocer la vida de esta joven, el ministro del Deporte, Ernesto Lucena, quien dejará pronto el cargo, decidió darle una mano a esta mujer y apoyarla en su deseo de estudiar derecho.

Acompañados por una cámara de Caracol, él sorprendió a esta joven y le contó que por su buena relación con la Universidad Sergio Arboleda logró conseguirle una beca para que continúe con sus estudios.

“Me impactó lo emprendedora que puede ser solo por cumplir un sueño. Los actos de bondad apegados esas oportunidades que muchos colombianos saben aprovechar era lo que se estaba buscando”, dijo Lucena.

Michelle Polanco ahora tiene una nueva ilusión en su vida y asegura que no dejará de vender aguacates porque le “cambiaron la vida” aunque ella desea llegar mucho más lejos porque su “ilusión es llegar a un cargo público para ser la voz de los jóvenes”.